Un grupo de 65 familias de Cinchona, que fueron afectadas por el terremoto del 2009, recibieron ayer su casa propia en el proyecto Caliche, en Sabana Redonda de San Pedro de Poás de Alajuela.
La inversión asciende a ¢1.290 millones. Las viviendas, de 42 metros de construcción, se ubican en lotes de 170 metros cuadrados.
El costo de las casas para casos especiales (personas con discapacidad o adultos mayores) fue de 27 millones de colones, mientras el resto tiene un valor aproximado a los ¢20 millones, cada una.
Xinia Salas Arias es viuda y vive con sus dos hijos: Allan, de 20 años, y Andrés, de 18 años. Ambos padecen una enfermedad neurológica degenerativa. Para esta familia es una gran alegría poder vivir en una vivienda propia, diseñada especialmente para ellos.
La pareja formada por Lilliana Barquero Jiménez, de 73 años y Orlando Bolaños Matamoros, de 74 años, también recibió una casa acondicionada para sus necesidades, por ser adultos mayores.
El ministro de Vivienda y Asentamientos Humanos, Guido Alberto Monge, aseguró que conseguir terrenos para este tipo de obras no es fácil, sobre todo cuando se trata de no desarraigar a las familias.
Ese factor, en parte, explica el atraso de cuatro años en la construcción del proyecto.
“Desde lo del terremoto estamos con lo del bono. No hay como vivir en lo propio, porque hay gente que se incomoda por alquilar. Ahora, gracias a Dios y la lucha de casi cinco años, ya tenemos casita”, expresó Daniel Cruz Girón, beneficiado del plan habitacional.
Al igual que Cruz y su esposa, Vanesa Céspedes Jiménez, la mayoría de los vecinos alquilaban viviendas en condiciones no aptas para sus familias.
Por ejemplo, unos vivían en galerones y otros en habitaciones pequeñas con goteras o problemas de infraestructura.
“Esto lo fuimos llevando de la mano, porque hay una gran cantidad de trámites en la Secretaría Técnica Nacional Ambiental, la Municipalidad, Acueductos y Alcantarillados, que hay que ir cumpliendo poco a poco y, la verdad, no ha sido fácil solucionar esos problemas”, dijo el ministro Monge.
La representante del comité de vecinos del proyecto Caliche, Denia Salazar, resaltó en el acto de entrega de las casas: “hoy recogemos el granito de arena que el Banvhi (Banco Hipotecario de la Vivienda), el Ministerio de Vivienda y cada uno de nosotros aportó”.