Bruselas, París y Ginebra. AFP, EFE y AP. Los ministros de Relaciones Exteriores de los países de la Unión Europea (UE) acordaron anoche, en Bruselas, levantar el embargo de armas para los rebeldes sirios, pero se comprometieron a no entregar armamento hasta el 1.° de agosto y a respetar una serie de condiciones.
El anuncio lo hizo el canciller británico, William Hague. La decisión va en el sentido deseado por Gran Bretaña y Francia , los dos únicos países de la UE que llevaban meses reclamando la posibilidad de proporcionar armas a la oposición moderada.
La decisión se adoptó mientras se hacen esfuerzos en procura de encontrar una salida a la guerra civil en Siria, que ya ha dejado más de 70.000 muertos desde marzo del 2011.
Ayer, en Ginebra, Estados Unidos, Turquía y Catar persuadieron al Consejo de Derechos Humanos de la ONU para que sostenga otro debate urgente sobre la guerra civil en Siria, la primera sesión de esa naturaleza en más de un año.
El presidente del Consejo, Remigiusz Henczel, dijo que la reunión se llevará a cabo mañana.
Otro esfuerzo diplomático, la convocatoria de una conferencia internacional sobre la paz en el país árabe, no será “una tarea fácil”, advirtió el lunes en París el canciller ruso, Serguéi Lavrov, tras reunirse con el secretario de Estado estadounidense, John Kerry.
Ambos hablaron sobre la reunión “Ginebra 2”, que debería congregar a representantes del gobierno de al-Asad y de la oposición.
Decisión dividida. Pero mientras esta iniciativa se concreta, “la UE ha decidido poner término del embargo de armas para la oposición siria y mantener las otras sanciones contra el régimen sirio”, manifestó Hague, en Bruselas. “Es el resultado que deseaba Gran Bretaña”.
Para él, tal decisión “manda un mensaje muy fuerte de Europa al régimen de (Bashar al-) Asad”.
Afirmó que Gran Bretaña no prevé “de inmediato” suministrar armas a los insurgentes. La suspensión del embargo “da la posibilidad de hacerlo si se sigue deteriorando la situación” en Siria, declaró el ministro británico.
En el mismo sentido se expresó el canciller español, José Manuel García-Margallo. “Son cuestiones diferentes. Lo que se ha planteado es si éramos partidarios o no de que la UE mandase el mensaje político de que se autorizará el levantamiento del embargo de armas; eso no quiere decir que vayamos a hacerlo directamente”.
La medida se adoptó al término de una reunión de más de 12 horas en Bruselas, bastante más larga de lo previsto por las “discusiones difíciles” entre ministros, según fuentes diplomáticas. Varios países, como Austria y la República Checa, se oponían con gran firmeza a una suspensión del embargo.
Catherine Ashton, titular de la diplomacia de la UE, indicó que el suministro de armas está “destinado a la protección de los civiles” y sometido a cierto número de condiciones, sobre todo en relación con controles sobre sus destinatarios, con el fin de impedir que caigan en manos de grupos radicales.
En el frente militar, las tropas del régimen ganaron terreno ayer, en una ofensiva de nueve días por recuperar la estratégica ciudad de Kuseir, cerca de la frontera con Líbano.
Hubo informes sobre intensos combates en Kuseir y alrededor de la base militar cercana de Dabaa. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, grupo a favor de la oposición, afirmó que las tropas del régimen y los combatientes aliados de la milicia Hezbolá capturaron la ciudad vecina de Hamidiyeh, apretando el cerco sobre Kuseir. Trataban de capturar el pueblo de Haret al-Turkumen para poner a Kuseir en “estado de sitio completo”, agregó.