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Kiev. AP y EFE. En una jornada de grandes cambios que podría alterar significativamente el rumbo político de Ucrania, dirigentes opositores firmaron ayer un acuerdo con el presidente que incluye elecciones anticipadas, una Constitución reactivada y un gobierno de unidad nacional.
El Parlamento, en uso de sus poderes recuperados, cesó al detestado ministro del Interior y dispuso la liberación de Yulia Timoshenko, la ex primera ministra que ha pasado más de dos años en la cárcel bajo cargos que sus partidarios consideran contaminados por la política.
Empero, el acuerdo no fue del agrado de todos y el ala más radical de los opositores, denominada Sector de Derechas, dio un ultimátum a los líderes de la oposición para que exijan en menos de 12 horas la dimisión inmediata del presidente, Víktor Yanukóvich.
El comandante de una centuria de las llamadas autodefensas del Maidán, como se conoce el movimiento de protesta, interrumpió una intervención del líder del partido opositor UDAR, Vitali Klitschkó, para desautorizar a los políticos que negociaron el acuerdo.
“ Hablo en nombre de mi centuria.(...) Si antes de las 10 de mañana (2 a. m. hora Costa Rica) no hay una declaración que exija la dimisión inmediata de Yanukóvich, tomaremos las armas. Se los lo juro” , exclamó el activista desde la tribuna.
El líder del Sector de Derechas, Dmitri Yarosh, también subió al escenario para decir que su formación no reconoce el acuerdo de paz y no depondrá las armas hasta que no dimita el presidente.
Con todo, si el ambicioso acuerdo se mantiene, podría significar un importante avance luego de meses de enfrentamientos que esta semana se agravaron bruscamente , con decenas de muertos y centenares de heridos.
Constitución revive. Horas después de la firma, el Parlamento votó devolver vigencia a la Constitución del 2004, que limita la autoridad presidencial y le devuelve algunos de los poderes que el presidente Yanukóvich se había reservado para sí tras su elección en el 2010.
Aunque Yanukóvich conserva una aparente mayoría en el Parlamento, pierde el poder de designar al primer ministro y cesar al gabinete. El cuerpo legislativo también aprobó una amnistía general.
También destituyó al ministro del Interior, Vitali Zajarchenko, detestado y considerado responsable de la violencia policial, incluso del empleo de francotiradores que mataron a decenas de manifestantes el jueves en el centro de Kiev.
El punto de discusión siguiente fue Timoshenko. Los legisladores votaron por 310-54 despenalizar el cargo bajo la cual estaba encarcelada, lo cual significa que deja de ser culpable de un delito. “Libertad a Yulia, libertad a Yulia”, corearon los parlamentarios.
No estaba claro cuándo saldría Timoshenko de la cárcel en la ciudad oriental de Jarkiv.
Tres cancilleres europeos pasaron dos días y una noche entera para negociar el fin del enfrentamiento, que comenzó cuando Yanukóvich decidió en noviembre no firmar un pacto de asociación con la Unión Europea(UE) para estrechar lazos con Rusia.
El acuerdo firmado el viernes puntualiza que se adelantarán las elecciones, del 15 de marzo del 2015, a diciembre a más tardar. Muchos sostienen que el plazo de diciembre es demasiado lejano: quieren que Yanukóvich renuncie inmediatamente.
En los próximos 10 días se designará un gobierno de unidad nacional que incluirá a dirigentes de la oposición.
Sin embargo, ninguno de los bandos obtuvo todo lo que quería y ciertas disposiciones ambiguas podrían dar lugar a fuertes disputas más adelante.
Según lo pactado, el gobierno no impondrá un estado de emergencia y las partes se abstendrán de la violencia. Los manifestantes deben entregar sus armas y levantar los campamentos.
