Damasco. AFP. La OTAN anunció ayer que mantendrá una reunión de urgencia mañana a petición de Turquía, sobre la acusación de derribo de un caza turco el viernes, por parte de Siria.
Ankara reclamó la reunión en el marco del artículo 4 del tratado de la Alianza que permite consultas “cada vez que (...) la integridad territorial, la independencia política o la seguridad de una de las partes se viese amenazada”.
El ministro turco de Relaciones Exteriores, Ahmet Davutoglu, hizo una advertencia a Damasco: “Nadie puede permitirse poner a prueba las capacidades (militares) de Turquía”, aunque precisó que por ahora no se baraja una acción militar en represalia.
Las relaciones entre Ankara y Damasco, dos aliados antes de que estallara el movimiento de contestación contra el presidente sirio Bashar al-Asad en marzo del 2011, están muy tensas.
Turquía ha pedido la dimisión del presidente sirio y acoge en su territorio a 32.500 refugiados de dicha nación, así como a soldados rebeldes y a la oposición política.
La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton calificó el incidente del avión de “descarado e inaceptable”.
Las autoridades turcas, por su parte, afirmaron que el caza turco derribado volaba en el espacio aéreo internacional, a 13 millas náuticas de Siria, para una misión de entrenamiento sin armas.
La represión y los violentos combates causaron ayer en Siria al menos 72 víctimas.