Damasco. AP y AFP. Los rebeldes sirios lanzaron ayer un ataque contra una base aérea estratégica en el norte del país. La ofensiva trata de desbaratar los ataques aéreos contra los bastiones rebeldes que dan importante ventaja al régimen del presidente Bashar al-Asad.
El ataque, reportado por activistas, se produce un día antes del comienzo de una conferencia internacional en Catar, en la que EE. UU. y sus aliados tratarán de reorganizar la conducción política de la oposición y unir sus filas.
Al ataque rebelde se sumaron combatientes de Jabhat al-Nusra, un grupo miliciano islámico inspirado por al-Qaeda e integrado por yihadistas extranjeros, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, de oposición.
Los combatientes de al-Nusra, considerados entre los más experimentados y disciplinados entre las fuerzas de oposición, han encabezado ataques a otras bases aéreas en el norte en los últimos meses.
La base de Taftanaz tiene sobre todo helicópteros militares. Está situada cerca de la carretera principal entre la capital Damasco y la ciudad de Alepo, por cuyo control los dos bandos luchan hace meses.
Por otra parte, el ejército israelí presentó una denuncia ante la ONU después de que tres tanques sirios entraran ayer por la mañana en la zona desmilitarizada entre los dos países en los Altos del Golán.
Según medios israelíes, los tanques ingresaron en la localidad siria de Beer Ajam para combatir a los rebeldes. Según la radio pública israelí, el ejército elevó su nivel de alerta tras el incidente, pero la portavoz militar se negó a comentar esta información.
Siria se encuentra en estado de guerra con Israel, que le arrebató en la guerra de los Seis Días (1967) gran parte de los Altos del Golán.