“Son declaraciones fabricadas e inventadas”, aseguró el mandatario a la estatal Agencia Guatemalteca de Noticias (AGN) durante una gira de trabajo por el municipio de Mixco, al sur de la capital, donde rechazó los señalamientos formulados en su contra el jueves por Hugo Ramiro Leonardo Reyes ante el Tribunal Primero A de Mayor Riesgo. Reyes dijo que observó cómo Pérez Molina ordenó asesinatos, saqueos y torturas en contra de indígenas ixiles entre 1982-1983.
Sin embargo, el gobernante puso en duda no solo la identidad del testigo, de quien dijo, existe la posibilidad de que haya usado un nombre falso, si no que además cuestionó si el testigo hubiera podido estar de alta en el ejército en aquella época, pues estimó que entonces tendría apenas 16 años de edad.
Los registros castrenses no muestran coincidencia entre las aseveraciones del supuesto ‘kaibil’ (soldado élite) y el periodo en que se registraron los pasajes que motivan el proceso, dijo el mandatario.
“No voy a emitir comentarios sobre eso”, afirmó el gobernante a los periodistas sobre los señalamientos que hizo en su contra el antiguo colaborador del ejército.
La analista Raquel Zelaya, directora de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, aseguró que a partir del señalamiento de Reyes en contra del mandatario, su imagen se verá desgastada en lo político por la gravedad de la acusación, añadió.