París
El presidente francés François Hollande nombrará como primer ministro al actual ministro del Interior, Manuel Valls, de origen español, en lugar de Jean-Marc Ayrault, quien renunció tras la derrota de los socialistas en las elecciones municipales, indicaron este lunes fuentes informadas a la AFP.
Hollande se dirigirá al país por televisión a las 8 p. m.hora local.
El Gobierno ya dio el primer paso para la gran movida, al anunciar al final de tarde la renuncia de Ayrault, quien estaba en funciones desde la llegada de Hollande al poder en mayo de 2012.
Pero fuentes cercanas al mandatario, que bate récords de impopularidad, dan por hecho que ha llegado la hora de Valls, tras el sismo electoral que ha dado alas a la oposición de derecha y a la ultraderecha.
El joven político, de 51 años, es una de las pocas figuras del Partido Socialista que se mantiene en lo alto de los sondeos, aunque sus posturas de firmeza contra la delincuencia le han valido críticas dentro de la izquierda.
Ahora se convertirá en la última carta de los socialistas para redorar el blasón y no perder el poder en las elecciones presidenciales y legislativas de 2017.
Las elecciones del domingo fueron "una derrota local y nacional para la izquierda y el gobierno", reconoció el propio Valls.
El revés llega además a dos meses de las elecciones europeas del 25 de mayo, que se presentan poco halagüeñas para la izquierda.
Valls nació en Barcelona, el 13 de agosto de 1962, en una familia de artistas (su padre, Xavier Valls era un reconocido pintor catalán) y se naturalizó francés a los 20 años, después de la elección del presidente socialista François Mitterrand (1981-95).
A menudo ha proclamado su "orgullo" de "estar al servicio de Francia ", sin dejar por ello de asumir su origen español.
Una fidelidad que no abarca al ámbito futbolístico, pues no vaciló en revelar que hincharía por el Barça contra el París Saint-Germain (PSG) cuando ambos equipos se enfrentaron el año pasado en cuartos de final de la Liga de Campeones.
Su carrera política fue sin fallas -alcalde de Evry (suburbio de París) en 2001, diputado, ministro del Interior- y se construyó en torno a un credo: la seguridad. En 2001, atribuyó la derrota de Lionel Jospin en la presidencial precisamente a su negativa a abordar ese "tema tabú" para la izquierda.