San Salvador
El fiscal general de la República, Douglas Meléndez, dijo el miércoles que confirmó que el Ministerio Público está infiltrado por el crimen organizado y que funcionarios de la institución están involucrados en la filtración de información sobre casos que se están investigando.
"Claro que hay fiscales involucrados en los casos, los estamos detectando, están fugando información a otra gente y estamos en esas investigaciones", dijo el jefe del Ministerio Público luego de participar en una entrevista en una radio local.
Meléndez detalló casos específicos en los que las personas que estaban por ser capturadas fueron advertidas y escaparon, y dijo que algunos hasta recibieron protección, de sectores o personas a las que no identificó.
Se refirió al caso del exdirector de centros penales, Nelson Rauda, vinculado en una investigación de la tregua entre pandillas y quien supuestamente fue advertido de que sería capturado y se dio a la fuga.
"Rauda fue movilizado fuera de San Salvador, Rauda debió ser detenido, Rauda estaba en la oficina, extrañamente no se detuvo y fue movilizado fuera de San Salvador, entonces esa investigación no está cerrada" , manifestó.
Agregóque durante la persecución de Rauda "tuvimos información que esa persona estaba siendo protegida, entonces puede haber elementos de fuga de información y puede haber elementos de protección o incidencia en las investigaciones".
Problema persiste. Meléndez manifestó que cuando llegó a la institución a principios del año, "les movimos el piso, les quitamos jefaturas que estaban a sueldo de gente de afuera" , pero reconoció que continúa la filtración de información y ya están trabajando para identificar a los responsables de la institución.
El fiscal general también ha ordenado que se revise el manejo del centro de escuchas telefónicas, que funciona bajo su jurisdicción.
Señaló que en el caso de la captura del ex fiscal general Luis Martínez y del empresario Enrique Rais y otras seis personas entre abogados y jueces, "se hizo un mal uso del centros de escuchas" porque arrojó elementos probatorios de que había un fraude procesal, que se había estado creando pruebas y que había una conspiración para meter presa a la señora Claudia Herrara, que se estaba hablando hasta a que juzgado la iban a llevar y "entonces el centro de escuchas fue mal usado".
Martínez, que dirigió el Ministerio Público entre el 2012 y el 2015, es acusado de los delitos de omisión de investigación y fraude procesal, pues sabía que se habían fabricado pruebas en el caso contra la señora Herrera y no hizo nada para investigar el fraude, según reveló Meléndez.