La catástrofe en el edificio Rana Plaza, en Savar, en las afueras de la capital, causó al menos 381 muertos, así como un millar de heridos graves y desaparecidos.
Aparte del arresto ayer del propietario del edificio de ocho pisos, Sohel Rana, las autoridades dijeron que buscan a un sospechoso de nacionalidad española.
Se trata de David Mayor, director general de Phantom-Tac, una empresa formada por la asociación en partes iguales de Phantom Apparels (Bangladés) y Textile Audit Company (España).
Las autoridades detuvieron al propietario cerca de la frontera oeste, en Benapole. Rana es sospechoso de haber violado las normas de construcción vigentes.
Fuego. Un incendio estalló ayer en la noche en los escombros del edificio, y ocasionó la muerte de una mujer que estaba siendo extraída de las ruinas, declaró Ahmed Ali Said, jefe de los bomberos.
“El fuego estalló en medio de los escombros en el momento en que estábamos sacando a quien creíamos era el último superviviente. La mujer murió”, declaró Alí Said.