Fortaleza, Brasil. AFP. Críticos a la hegemonía de Estados Unidos y Europa, las potencias emergentes del BRICS lanzaron ayer, en su VI Cumbre en Fortaleza (noreste de Brasil), una nueva arquitectura financiera propia, con la constitución de un banco de desarrollo con sede en Shanghái y un millonario fondo de reservas.
“Tomamos una decisión histórica de crear el banco de los BRICS y el acuerdo de reservas, que son una contribución importante para la reconfiguración del sistema de gobernanza económica internacional”, declaró la presidenta Dilma Rousseff al anunciar el acuerdo.
El nuevo banco de desarrollo de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se destinará a financiar las grandes obras de infraestructura que estos países y otros en desarrollo necesitan, tendrá un capital inicial de $50.000 millones, repartido en partes iguales entre Brasil, China, India, Rusia y Sudáfrica, según la declaración oficial emitida al final de la cumbre.
Los presidentes de Rusia, Vladimir Putin; China, Xi Jinping, Brasil, Dilma Rousseff, y Sudáfrica Jacob Zuma, y el primer ministro de India, Narendra Modi, que autorizaron un capital total del banco de hasta $100.000 millones, cerraron el último escollo de la negociación: la sede estará en Shanghái y su primer presidente será indio.
Los mandatarios también alcanzaron el tratado por el que se comprometen a poner a disposición $100.000 millones de sus reservas internacionales ($41.000 China, $18.000 Rusia, Brasil e India, cada uno, $5.000 Sudáfrica) en caso de crisis en uno de esos países.
“Será un medio muy poderoso para prevenir nuevas dificultades económicas” , declaró el ruso Vladimir Putin.
Otro sistema. Las nuevas instituciones son consideradas por el BRICS como un contrapeso al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional (FMI) donde los miembros de ese bloque se sienten injustamente representados.
En su declaración final, los cinco líderes reclamaron la inmediata aplicación de la reforma acordada en el 2010 y que les da más representación en el FMI y cuya parálisis, dijeron, “impacta negativamente la legitmidad y la credibilidad” del organismo.
“Precisamos trabajar en la mejora de la gobernanza económica a nivel global. Aumentar la representatividad y la voz de los países en desarrollo”, declaró el presidente Xi Jinping.
Este también llamó al dispar grupo de los BRICS a alcanzar “una asociación más sólida y explorar un mercado más integrado”.
Para el ministro de Comercio e Industria de Brasil, Mauro Borges, “el nuevo banco de desarrollo es clave para impulsar el crecimiento en los países del BRICS”, que ya no registran las astronómicas alzas de PIB de una década atrás, un tema que los presidentes comentaron.
Rousseff indicó que, a pesar de una disminución en el ritmo de su crecimiento, los países emergentes del BRICS que representan el 20% del PIB mundial y el 40% de su población, “continúan siendo una fuerza motriz”.
Los líderes del BRICS debían trasladarse la noche del martes a Brasilia para su primera reunión con los presidentes de Suramérica prevista para hoy. Con esa reunión quedará clausurada esta sexta cumbre del grupo.
Los BRICS no se inhibieron en abordar temas de política internacional y lamentaron la falta de progreso en la resolución del conflicto israelo-palestino y las crisis en Ucrania, Irak y Siria.
Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica “lamentan la falta de progreso concreto en la mayoría de estas situaciones”, dijo Rousseff en la cumbre celebrada en Fortaleza, en el noreste de Brasil.
Vladimir Putin llegó a la cumbre del BRICS aislado en la escena internacional y excluido del G-8 de naciones más industrializadas, por la crisis de Ucrania.
Kiev, Washington y Europa acusan a Moscú de armar y financiar a los separatistas prorrusos del este de Ucrania, que mantienen sangrientos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad ucranianas.
Esta fue la primera cumbre y gran gira del primer ministro indio después de su reciente elección, que mantuvo en Brasil primera bilateral con el presidente chino, Xi Jinping, y se reunirá este miércoles con Rousseff.
El presidente chino aprovecha su gira latinoamericana para dejar claro su interés en la región, en la que compite con Estados Unidos por la primacía comercial.
Mañana, jueves, lanzará en Brasilia un Foro China-América Latina con dirigentes de países latinoamericano.