Bagdad
Más de 140.000 personas huyeron de los combates entre las fuerzas de seguridad y los insurgentes en la provincia de Al Anbar, al oeste de Bagdad, informó la ONU este viernes.
"Es el mayor desplazamiento en Irak desde la violencia interreligiosa de 2006-2008", declaró el portavoz de la agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR), Peter Kessler, que afirma que las cifras fueron proporcionadas por el gobierno iraquí.
En sólo una semana huyeron 65.000 personas, dijo Kessler, añadiendo que "muchos civiles no pueden salir de las zonas de conflicto, donde empiezan a escasear la comida y la gasolina", añadió.
Miles de estos desplazados huyeron a Bagdad o a otras provincias cercanas pero otros se dirigieron a las regiones kurdas del norte del país, informa la agencia.
ACNUR lamenta la situación de estos iraquíes que no tienen dinero, comida, ni ropa de abrigo y cuyos hijos "no van al colegio".
Unos combatientes antigubernamentales se han apoderado hace varias semanas de barrios enteros de Ramadi, capital provincial de Al Anbar, y de toda la ciudad vecina de Faluya, 60 km al oeste de Bagdad.
Desde entonces, el ejército lleva a cabo operaciones para intentar arrebatar estos barrios a los insurgentes, algunos de los cuales son combatientes del Estado Islámico en Irak y el Levante (EIIL), un grupo vinculado a al-Qaeda.