“El Consejo Electoral ha tomado su decisión y yo, jefe de Estado y de gobierno, apoyo absolutamente el poder electoral, que haga lo que tenga que hacer en el marco de la ley. Nosotros le damos todo el apoyo institucional y político”, dijo Maduro en su discurso tras jurar como presidente en la Asamblea Nacional.
Maduro, sucesor de su mentor el fallecido mandatario Hugo Chávez, admitió tener algunas diferencia con la decisión del CNE, aunque consideró que “es un tema zanjado”.
El jueves, el CNE anunció la auditoría al 100% luego de que la víspera recibiera una impugnación de Capriles, que perdió las elecciones con un 49% de los sufragios ante un 50,8% que obtuvo Maduro.
El ente electoral ya auditó el 54% de las urnas, en un procedimiento de revisión que suele hacerse tras cada jornada de votación en Venezuela , según la ley.
Ahora, el CNE extenderá la auditoría al universo del 46% restante de las cajas, mediante una muestra de aproximadamente dos terceras partes de las cajas aún no auditadas.
El mandatario también llamó al diálogo a los políticos de la oposición.
“Llamo a quienes sean políticos de la oposición, socialdemócratas, socialcristianos, de centroderecha, de centroizquierda los llamo a conversar en los distintos escenarios que se pueda conversar. Yo estoy dispuesto a conversar hasta con el diablo”, dijo Maduro en su discurso.
“Hasta con el nuevo Carmona si es necesario para que él cese en su intolerancia”, siguió Maduro, refiriéndose a Capriles, aunque comparándolo despectivamente con el empresario venezolano Pedro Carmona, que asumió por unas horas el poder en Venezuela durante el golpe de Estado contra Hugo Chávez en abril de 2002.
Capriles ya había pedido diálogo el martes con el gobierno para resolver la crisis política que se desató después de que el líder opositor desconociera los resultados y anunciara movilizaciones.