Faluya (AFP). Catorce guardias fronterizos iraquíes murieron este miércoles en una emboscada tendida por hombres armados que establecieron un falso puesto de control en la carretera principal que une Irak y Arabia Saudí, informaron fuentes de la seguridad.
Los atacantes los mataron y luego prendieron fuego a dos cadáveres, explicaron las fuentes.
El ataque se produjo por la mañana en una zona desértica, a 200 kilómetros al oeste de la ciudad santa chiita de Kerbala.
Según el general Yaser Asem, las víctimas circulaban en convoy, concretamente en tres vehículos civiles.
Una fuente médica de la clínica de la aldea de Nujaib confirmó haber recibido 14 cadáveres.