México. AFP. Los presidentes de México , Enrique Peña Nieto, y China, Xi Jinping, expresaron ayer su intención de abrir una nueva fase de cooperación en las relaciones entre sus países, durante el inicio de la visita de Estado que desarrollará hasta hoy el mandatario asiático.
Peña Nieto y Xi, que ayer se reunieron por segunda vez en menos de dos meses, quieren relanzar sus vínculos comerciales a partir de la reciente llegada al poder de ambos y dejar así atrás una relación que en los últimos años estuvo marcada por varios desencuentros políticos y la competencia por el acceso de sus productos a Estados Unidos.
“Su presencia en México permitirá dar contenido a la nueva fase de cooperación entre ambas naciones (...). China y México deben aprovechar su complementariedad y reconocerse como grandes aliados”, afirmó Peña Nieto a su homólogo durante la ceremonia de bienvenida realizada en un céntrico campo militar de ciudad de México.
Después de su periplo por Trinidad y Tobago y Costa Rica , México es la última escala de la gira latinoamericana de Xi antes de viajar a California, donde se reunirá el 7 y 8 de junio con el presidente estadounidense, Barack Obama.
México es el segundo socio comercial de China en América Latina, tras Brasil, y Pekín es el segundo socio mundial de México después de Estados Unidos, adonde exporta el 80% de sus productos.
Pero, para México, la balanza comercial con la segunda economía mundial es profundamente deficitaria. El año pasado, México importó 57.000 millones de dólares en mercancías de China y solo exportó 5.721 millones de dólares hacia el gigante asiático, de acuerdo con datos del Banco de México.
“Aspiramos a ampliar y a equilibrar nuestra relación comercial e incrementar las inversiones recíprocas”, afirmó el presidente de México , uno de los países del mundo que ha suscrito más tratados de libre comercio –incluido uno con Estados Unidos y Canadá–, aunque ninguno con China.
Para empezar a ajustar el desequilibrio comercial, se espera que ambos líderes firmen una decena de acuerdos en materia comercial y también de infraestructura, ciencia, educación e inversiones.
Las relaciones entre México y China se enfriaron durante el pasado gobierno mexicano de Felipe Calderón (2006-2012).
En 2012, el Gobierno mexicano acusó a Pekín de otorgar subsidios desleales a su industria textil y un año antes había recibido al líder tibetano Dalai Lama, lo que provocó molestias en el Gobierno chino.
La última visita de Estado de un presidente chino a México fue la de Hu Jintao, en el 2005.