México (AFP). Los líderes de México y China se reunirán por segunda vez en dos meses la semana entrante, una señal de que buscan profundizar su cooperación, aunque el país latinoamericano intenta erradicar el enorme déficit comercial que tiene con su socio de Asia.
Xi Jinping, quien en marzo se convirtió en el presidente de China, será acogido el martes por su par mexicano, Enrique Peña Nieto, con una suntuosa bienvenida en el campo militar Marte de Ciudad de México, así como con un discurso ante el Congreso.
La visita oficial se extenderá hasta el miércoles y se espera que ambos países firmen diez acuerdos en materia de comercio, inversión, infraestructura, ciencia y educación.
Peña Nieto ya se había reunido con Xi durante una visita oficial a China en abril, cuatro meses después de haber asumido la presidencia. Según expertos, ese viaje muestra que el mandatario mexicano busca dejar atrás viejas rivalidades comerciales para construir una relación más cercana.
“Hay una nueva dinámica entre la relación de los dos países”, dijo a la AFP el subsecretario mexicano de Relaciones Exteriores, Carlos de Icaza.
La reciente llegada al poder de ambos presidentes “abre la oportunidad de fortalecer la comunicación política, encontrar una manera de que los flujos comerciales y de inversiones entre ambos países sean más equilibrados”, añadió.
México importó el año pasado $57.000 millones en mercancías de China y solo exportó $5.721 millones hacia el país asiático, de acuerdo con datos del Banco de México (central).
“Estamos buscando vías para superar los desequilibrios comerciales que hay entre China y México”, aseguró Icaza.
Xi, quien llegará a territorio mexicano luego de haber visitado Trinidad y Tobago y Costa Rica, dejó entender que China está dispuesta a colaborar en ese sentido.
“China nunca ha buscado intencionalmente tener la ventaja en el comercio bilateral”, dijo Xi a la oficialista agencia china de noticias Xinhua.
El país asiático “está listo para sumarse a los esfuerzos del lado mexicano a fin de impulsar el potencial, ampliar la balanza, optimizar la estructura de comercio bilateral y buscar el equilibrio comercial”, añadió.
El presidente Xi incluso indicó que su país desea explorar la posibilidad de negociar un tratado de libre comercio con México.
China, la segunda economía más grande del mundo, ha extendido en los últimos años sus lazos comerciales e inversiones en Latinoamérica, donde explota las riquezas de la minería y del petróleo para sostener su crecimiento, que alcanzó 7,7% en los primeros tres meses de 2013.
Brasil, la primera economía de América Latina, así como su sucesor México, son los socios más importantes de China en la región.