Tegucigalpa. (AFP). Unos 2.000 maestros hondureños protestaron hoy en Tegucigalpa contra el aumento de la edad de jubilación estipulado en una ley del magisterio que aprobó el Congreso.
“El maestro consciente aquí está presente”, gritaban los manifestantes que marcharon, con mantas y pancartas, en los alrededores de la Universidad Pedagógica, provocando un severo congestionamiento de vehículos.
El objetivo de la protesta es “la derogación” de la ley del Instituto de Previsión del Magisterio, que cubre a unos 54.000 educadores que dan clases a más de dos millones de estudiantes, explicó Luis Sosa, activista del movimiento.
La nueva ley del organismo “nos sube la jubilación de 56 años que era antes a 65 y además nos han aumentado los intereses de los préstamos”, se quejó Sosa.
“Otra cosa (demanda) es que se derogue la Ley Fundamental de Educación porque eso lleva a la privatización de la educación, ya están mandando facturas de cobro de luz y agua a las escuelas”, aseveró el dirigente.
En enero pasado el Congreso aprobó una nueva ley educativa definida por el gobierno como una “revolución” de la enseñanza, pero a la que se oponen los sindicatos de educadores.
La reforma educativa, además de elevar la edad de jubilación para los docentes, extiende la obligatoriedad de la educación hasta la secundaria (antes sólo la primaria) y fija un mínimo de 200 días de clase por año lectivo.
También incorpora el inglés como materia obligatoria en todos los niveles y obliga a los nuevos docentes a contar con título universitario.