Atenas. AFP. Decenas de miles de personas se manifestaron ayer en Grecia, en el primer día de una huelga general de 48 horas contra las nuevas medidas de austeridad que hoy votará el Parlamento para evitar la quiebra del país.
Tras un cartel con el lema “Los seres humanos antes que nada, no los números ni las medidas”, 25.000 personas se manifestaron en Atenas convocadas por los dos grandes sindicatos, GSEE y ADEDY, y 15.000 más llamadas por el sindicato comunista PAME, según datos de la Policía.
En Tesalónica (norte), segunda ciudad del país, en una zona muy golpeada por el desempleo, unas 20.000 personas respondieron al llamado a manifestarse.
Mientras tanto, los transportes estaban paralizados por la huelga general, así como los servicios públicos, salvo algunas escuelas.
“Estas medidas nos llevan muchos años atrás. Todos los derechos laborales conquistados por el pueblo griego desde la Segunda Guerra Mundial y el fin de la dictadura (en 1974) quedan anulados”, declaró la sindicalista María Lavrentiadou.
Las manifestaciones, que se desarrollaron pacíficamente, son las primeras antes de las grandes marchas previstas hoy por la noche, en coincidencia con la votación en la cámara.
El proyecto de ley plurianual (2013-2016), contenido en un solo artículo de unas 400 páginas en total, incluye un nuevo retraso en la edad de jubilación, que pasa de los 65 a los 67 años, y la supresión de las pagas extra de los funcionarios.
Prevé también la reducción de algunas prestaciones sociales, impone un control más estricto de las empresas públicas, la reorganización del sistema de sanidad y una desregulación de la legislación laboral.
Los acreedores de Grecia, la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), hicieron de la adopción de estas medidas, así como del presupuesto estatal para 2013, que será votado el domingo, condiciones sine qua non para considerar el desbloqueo del siguiente tramo del rescate concedido a Grecia para evitar la bancarrota.
Dicho tramo asciende a 31.200 millones de euros, y Grecia lo necesita rápido ya que el 16 de noviembre afronta un vencimiento de deuda de 5.500 millones.
El ministro de Finanzas, Yannis Stournaras, justificó el procedimiento de urgencia adoptado para la adopción de la ley-marco, afirmando que Grecia necesita “el pago inminente del tramo (del rescate) para evitar una quiebra desordenada”.