Madrid y Bilbao. AFP y EFE El Gobierno y los partidos políticos en España acogieron con frialdad el nuevo comunicado de ETA en el que la organización separatista vasca se muestra dispuesta a negociar con vistas a su “disolución”, exigida por España y Francia.
“Sobre lo que diga ETA o deje de decir, solo nos interesa una cosa y es que el único comunicado que esperamos y que exigimos, y para lo que estamos trabajando, es que se produzca su disolución incondicional”, dijo ayer el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.
Respondió de esta manera al comunicado de ETA , enteramente redactado en vasco, que publicó ayer el diario independentista Gara , habitual canal de comunicación del grupo armado, que el 20 de octubre del 2011 anunció “el cese definitivo de su actividad armada”, tras más de 40 años de lucha por la independencia del País Vasco.
En su nuevo comunicado, ETA afirma querer negociar “las fórmulas y plazos para traer a casa a todos los presos y exiliados políticos vascos”, según los extractos traducidos al castellano por Gara .
ETA , reducida a algunas decenas de miembros activos todavía en libertad tras las detenciones llevadas a cabo en estos últimos años, esencialmente por las policías española y francesa, propone una “agenda de diálogo”.
ETA , incluida en la lista de organizaciones terroristas de EE. UU. y la UE, es considerada responsable de la muerte de 829 personas y su último atentado mortal en suelo español se remonta a agosto del 2009.
La organización armada reclama regularmente un diálogo con España y Francia, y considera que el tema de sus presos, unos 700 en cárceles francesas y españolas, es uno de los principales puntos para una eventual negociación.