Esa misión integrada por las Naciones Unidas para la estabilización de Malí (Minusma), que relevará a la misión Misma (fuerza panafricana), será desplegada el 1° de julio próximo, si las condiciones de seguridad lo permiten, y “por un periodo inicial de 12 meses”.
En los próximos 60 días, el Consejo deberá determinar si la seguridad sobre el terreno es suficiente, indica la resolución, puesta a punto por Francia y adoptada por unanimidad.
La Minusma abarcará un máximo de 11.200 soldados y 1.440 policías, entre ellos algunos “batallones de reserva capaces de ser rápidamente desplegados”.
El texto autoriza a “las tropas francesas (...) a intervenir en respaldo a componentes de la Minusma en caso de peligro grave e inminente” para ellos “y a pedido” del secretario general de la ONU Ban Ki-moon.
Alrededor de mil soldados franceses permanecerán en Malí para oponerse a una eventual guerrilla conducida por los grupos islamistas. El ejército francés dispone también de bases de retaguardia en Senegal, Costa de Marfil y Chad.
Los cascos azules colaborarán con las autoridades de Malí en el establecimiento de “un diálogo político nacional”, la organización de elecciones “libres, equitativas y transparentes”, y la promoción de la reconciliación con los tuareg del norte del país.