Maseru. AFP. El primer ministro de Lesoto, Thomas Thabane , aseguró ayer que huyó de su país para escapar de un golpe de Estado militar; sin embargo, el Ejército negó intentar derrocar al Gobierno de este reino montañoso del África austral.
“He sido derrocado, no por el pueblo, sino por las Fuerzas Armadas y eso es ilegal”, declaró Thabane a la BBC. “Llegué a Sudáfrica esta mañana y no me iré hasta que mi vida no corra peligro”, añadió.
“El Ejército tomó el control del cuartel general de la Policía y de la residencia del primer ministro en la capital, Maseru, a primeras horas del sábado, antes de retirarse a mediodía”, dijo el ministro de Deportes, Thesele Maseribane.
“El jefe (militar) dijo que me buscaba, que buscaba al primer ministro y al viceprimer ministro para llevarnos ante el rey. En nuestro país, eso significa un golpe de Estado”, arguyó el también jefe del Partido Nacional de Basoto (BNP).
Sin embargo, el portavoz del Ejército, Ntele Ntoi, negó las acusaciones, al afirmar que únicamente se desarmó a la Policía antes de volver a los cuarteles.
Negación. “No hubo ni nunca habrá un golpe en Lesoto perpetrado por los militares”, dijo el portavoz a la cadena sudafricana ANN7.
“El Ejército se lanzó a una operación para desarmar a la Policía, que, según informaciones recogidas por sus servicios, se disponía a armar a algunos partidos políticos en Lesoto” ,aseguró la fuente.
Miembros armados de las fuerzas de seguridad conducían patrullas en la capital durante la tarde.
Lesoto , formado en gran parte por altas mesetas, es un país muy pobre de dos millones de habitantes, miembro de la Commonwealth, que suministra a su gran vecino sudafricano agua y electricidad producida en sus montañas.
El reino, que solo cuenta con fronteras con Sudáfrica, está gobernado por una frágil coalición desde el 2012, formada por el All Basotho Convention (ABC) de Thabane, el Congreso de Lesoto para la Democracia (LCD) y el BNP.
“Desde las últimas elecciones, la coalición tenía problemas para trabajar y el primer ministro era muy criticado por su autoritarismo”, comentó un diplomático.
La violencia es recurrente en la historia política del país.