Bogotá. EFE. La detección de un caso sospechoso de ébola en Brasil , el primero que se registra en América Latina, puso ayer en alerta a los países vecinos y aumentó la preocupación ya existente en la región desde que se conoció el primer caso en Estados Unidos.
El guineano Souleymane Bah, de 47 años, llegado a Brasil el 19 de setiembre, ingresó ayer en el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas Evandro Chagas de Río de Janeiro y se espera conocer en las próximas horas el resultado del primero de los dos análisis de laboratorio que, según los protocolos, son necesarios para determinar si padece ébola.
Su caso fue [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20141010_0003]]declarado sospechoso[[END:INLINEREF]] por las autoridades brasileñas por proceder de Guinea Conakry, uno de los tres países de África occidental afectado por un brote que ha causado ya más de 4.000 muertes, y por encontrarse dentro del periodo de incubación, que es de 21 días.
Bah acudió el jueves a un centro médico de Cascavel, en el estado sureño de Paraná, una zona fronteriza con Argentina y Paraguay , porque el día anterior tuvo fiebre, tos y dolor de garganta.
Por su parte, el Gobierno de Argentina declaró el estado de “alerta epidemiológica” por el ébola, lo que significa que aumentarán las medidas de control de ingreso aéreo y fronterizo al país y los recursos para formar personal sanitario y dotar a los hospitales.
Algunos medios brasileños dijeron que Bah pudo entrar a Brasil por tierra desde Argentina, pero fuentes de la Dirección Nacional de Migraciones dijeron que no hay registro de “ningún ingreso” oficial del guineano al país.
Según el ministro brasileño de Salud, Arthur Chioro, la situación está “bajo control” porque las autoridades aplicaron inmediatamente los protocolos internacionales en el caso del guineano, que pidió refugio a su llegada a Brasil y obtuvo un permiso de estancia por un año.
El centro médico de Cascavel al que acudió Bah fue cerrado y aislado para realizar labores de esterilización y las autoridades ya han identificado y localizado a 64 personas que pudieron haber tenido contacto con el enfermo desde el miércoles, cuando sintió los síntomas.
Los tres médicos y enfermeros que atendieron directamente al paciente serán monitoreados dos veces por día y al resto se les medirá la temperatura una vez al día.
Vigilancia. En Argentina, antes de la alerta epidemiológica, se detectó y aisló a cinco personas; estos casos resultaron negativos.
Además, el Gobierno de Paraguay anunció ayer que mantiene en alerta centros de vigilancia epidemiológica y los controles en fronteras, especialmente con Brasil.
Las medidas serán más estrictas si el caso sospechoso detectado en Brasil se confirma, dijeron.
En Chile, ocho personas han sido sometidas a los protocolos establecidos para detectar eventuales casos de ébola desde julio, todos con resultados negativos, informó la ministra de Salud, Helia Molina. Muchos de los países latinoamericanos habían tomado medidas preventivas, pero la preocupación creció al conocerse hace más de una semana el primer caso de ébola diagnosticado en Estados Unidos .