“Creemos que con esta operación se habría descabezado” a Sendero Luminoso, manifestó el presidente peruano, Ollanta Humala, luego de informar de que, según fuentes de inteligencia, los abatidos son Alejandro Borda Casafranca, Camarada Alipio, y Marco Antonio Quispe Palomino, Camarada Gabriel, aunque se harán pruebas de ADN para ratificarlo.
El presidente también informó de un tercer abatido: el Camarada Alfonso, brazo derecho de Alipio.
“Es un golpe serio, irreversible, un golpe tremendo a la estructura de los grupos remanentes de Sendero Luminoso”, recalcó Humala.
El enfrentamiento que llevó a la muerte de los tres senderistas se registró la noche del domingo en la localidad de Llochegua, en la región de Ayacucho.
Allí Alipio ejecutaba “incursiones armadas, acciones de agitación y propaganda, así como el cobro de cupos a narcotraficantes y actividades de abastecimiento”, informó el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Sendero Luminoso está debilitado como organización y funciona desmembrado como un conjunto de bandas armadas al servicio del narcotráfico, según coinciden analistas peruanos. Los líderes de la guerrilla “van a seguir cayendo porque no tienen ideología y la lealtad de sus miembros es una lealtad monetaria”, opinó Carlos Tapia, exmiembro de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.
Sendero Luminoso surgió como una organización maoísta que lanzó una guerra popular en mayo de 1980, que al cabo de dos décadas dejó un saldo de 69.000 muertos y desaparecidos.