Montevideo
Una casa de remates de Montevideo organiza la subasta de un iPad utilizado por el papa Francisco con el que espera recaudar cerca de $40.000, que serán donados a una institución educativa cristiana en la ciudad de Paysandú, en la región noroeste de Uruguay.
"Últimamente nos han mostrado interés no solo desde nuestro país; desde otras partes del mundo nos están llamando, la repercusión ha sido muy grande", contó el organizador de la subasta, Juan Castells.
El aparato fue regalado por el papa Francisco al sacerdote uruguayo Gonzalo Aemilius durante una visita al Vaticano.
La relación entre ambos religiosos, sin embargo, empezó cuando el Papa todavía era arzobispo en Buenos Aires y apreciaba una institución educativa que dirigía el uruguayo en Montevideo.
Por ello, durante el encuentro en el Vaticano, le regaló su iPad, "para que pudiera hacer lo que le pareciera conveniente", contó Mónica Olivelli, directora del proyecto del Liceo Franciso –institución inaugurada este año en el interior de Uruguay e inspirada en el colegio capitalino dirigido por Aemilius–.
Para incentivar las obras de la nueva escuela, que surgió bajo la iniciativa de tres familias de Paysandú junto a la Iglesia católica local, Aemilius obsequió su regalo al proyecto.
El Liceo Francisco es un centro educativo de tiempo completo, religioso y gratuito de gestión privada, según se describe la institución que atiende 50 alumnos provenientes de situaciones de vulnerabilidad.
"La idea es que a cada año podamos recibir a 50 nuevos estudiantes, además de los que ya están", explicó Olivelli.
El dinero recaudado con la venta del iPad será utilizado en la ampliación del espacio para recibir a más alumnos y en la construcción de una estructura polideportiva.
El dispositivo que funciona normalmente, según la casa de remates, tiene teclado y lleva grabada la inscripción "Su Santidad Francisco" y servicio de Internet del Vaticano con fecha de marzo del 2013.
"Era con la que el Papa trabajaba normalmente, y además tiene un certificado de autenticidad expedido por el propio Vaticano", detalló Castells.
El valor de un aparato equivalente en el mercado comercial gira en torno a $600. "Este es un remate solidario", comentó.