Tokio. AFP. Japón y China necesitan estrategias de comunicación más complejas si quieren resolver su litigio territorial, afirmó el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, ayer en la capital nipona, donde reafirmó el respaldo de Washington a Tokio.
Estados Unidos permanecerá “inquebrantable” en su alianza con Japón, sostuvo Biden, en plena crisis diplomática por la decisión china de declarar una zona de defensa aérea en la región.
“Permaneceremos inquebrantables en nuestro compromiso de alianza”, aseguró Biden, acompañado por el primer ministro japonés, Shinzo Abe.
“A Estados Unidos le interesa reducir la tensión en esta importante región. Creo que todos los países del noreste de Asia comparten este interés con nosotros”, continuó.
“Esto subraya la necesidad de que haya mecanismos de gestión de crisis y canales de comunicación efectivos entre China y Japón para reducir el riesgo de escalada” de la tensión, añadió Biden.
El vicepresidente estadounidense indicó que esperaba “expresar estas preocupaciones de manera muy específica y directamente”, el jueves, ante los líderes chinos.
Zona de seguridad. Estados Unidos está “profundamente preocupado” por la zona de defensa aérea decretada por Pekín en el mar de China oriental.
El Gobierno nipón, por su parte, manifestó que confiaba en que obtendría el espaldarazo estadounidense en su oposición a una iniciativa que calificó de “extremadamente peligrosa”.
China anunció que defendería su “derecho” a controlar los aviones que sobrevuelen la zona definida, que incluye el archipiélago de las Senkaku, controlado por Tokio y reclamado por Pekín con el nombre de Diaoyu. Algunos analistas temen que este lío conduzca a un enfrentamiento armado.
“Nosotros seguimos muy preocupados por el anuncio de una nueva zona de defensa aérea”, declaró Biden al diario Asahi Shimbun , antes de reunirse con las autoridades de Japón.
“Yo ratificaré la fortaleza de nuestros compromisos de alianza y subrayaré la importancia de evitar acciones que puedan minar la paz, la seguridad y la prosperidad en la región”, expresó.
Biden también viajará a China y Corea del Sur.
Abe trataba de obtener un apoyo enérgico a su posición de que China se muestra agresiva y poco razonable. Se sintió apoyado cuando bombarderos estadounidenses B-52 sobrevolaron la zona de defensa aérea china pocos días después de que fuera anunciada.
“Confirmamos que no toleraremos el intento de China de cambiar el statu quo unilateralmente por la fuerza y continuaremos trabajando para tratar la situación con base en la fuerte alianza Estados Unidos-Japón” sostuvo Abe.