El papa Francisco se reunió la tarde de este martes con los jóvenes en el Estadio José María Morelos y Pavón, de Morelia, esto como parte de su gira por México.
El pontífice pidió a la juventud mexicana alejarse del dinero fácil y del narcotráfico.
"Jesús nunca nos invitaría a ser sicarios, sino que nos llama discípulos. Él nunca nos mandaría al muere, sino que todo en él es invitación a la vida. Una vida en familia y una comunidad a favor de la sociedad", dijo el Vicario de Cristo.
Su Santidad celebró un encuentro multitudinario, con cerca 100.000 jóvenes, en la cuarta jornada de su viaje a tierras aztecas.
"Es mentira que la única forma de vivir, de poder ser joven es dejar la vida en manos del narcotráfico o de todos aquellos que lo único que están haciendo es sembrar destrucción y muerte", aseguró.
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El papa dio varios consejos durante la actividad, entre esos valorarse y forjar un camino que valga la pena, aunque no se tengan los bolsillos llenos de dinero.
"La principal amenaza es cuando uno siente que tiene que tener plata para comprar todo, incluso el cariño de los demás. Creer que por tener un gran carro sos feliz", añadió.
Francisco admitió que es difícil sentir la riqueza del país cuando están expuestos continuamente a la pérdida de amigos o de familiares en manos del narcotráfico, de las drogas, de organizaciones criminales que siembran el terror, pero que lejos de eso serán valiosos y felices.
"Es difícil sentirse la riqueza de una nación cuando no se tienen oportunidades de trabajo digno, posibilidades de estudio y capacitación, cuando no se sienten reconocidos los derechos que terminan impulsándolos a situaciones límites", concluyó.
Molestia. Por primera vez en lo que va de su visita a México, el papa Francisco se mostró visiblemente molesto, luego del colorido encuentro con los jóvenes, quienes le cantaron y bailaron, el pontífice se acercó a saludar a algunos de los asistentes y detrás de una valla algunos lo jalaron, por lo que estuvieron a punto de derribarlo en un par de ocasiones.
El Santo Padre, visiblemente molesto, alzó el rostro y dijo: "eso no se hace, eso no se hace", según se alcanzó a apreciar en las imágenes en vivo de las cámaras que siguen su visita.
Posteriormente dio un par de pasos hacia atrás para tomar distancia, mientras que a través de los micrófonos pedían a la gente no aglomerarse. Francisco siguió saludando a la gente unos minutos más antes de salir del estadio.