Brasilia. AFP El candidato de la oposición socialdemócrata de Brasil, Aecio Neves, inició ayer la ofensiva para desplazar a la presidenta Dilma Rousseff y al Partido de los Trabajadores (PT) del poder en las presidenciales del 2014.
“Otros países, que son competencia nuestra, han hecho reformas que Brasil no ha hecho. El aprendizaje del PT en el Gobierno (en los últimos 13 años) está costando muy caro a Brasil”, expresó Neves, un día después de presentar el primer documento con sus propuestas de gobierno.
El crecimiento moderado de la economía brasileña en los últimos años y una inflación elevada pueden ayudar al Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) a recuperar el poder que perdió cuando Luiz Inácio Lula da Silva llegó a la Presidencia en 2003 como candidato del PT, estimó.
Tras multitudinarias protestas callejeras que sacudieron el país en junio por mejores servicios públicos y contra la corrupción de la clase política, Neves, exgobernador del estado de Minas Gerais entre 2002 y 2010 y actualmente senador, intenta presentarse como una fuerza de cambio.
“El 66% de las personas quiere un cambio. El gran desafío de las oposiciones es incorporar ese cambio”, dijo. “A diferencia de hace cuatro años, cuando el deseo era de continuidad, ahora el sentimiento es de cambio”, aseguró.
Plan de gobierno. En las directrices de su programa difundidas esta semana, Neves aseguró que acabará con el intervencionismo del Gobierno en las empresas públicas.
“Las empresas públicas tienen que presentar resultados”, agregó.
En el ámbito de las relaciones internacionales, criticó las políticas más basadas en lo “ideológico” que en las necesidades económicas del país, y reclamó una mayor apertura comercial, como una reforma del Mercosur, que permita a Brasil negociar por su cuenta acuerdos con otros países y bloques.
“En los últimos diez años priorizamos un alineamiento en cierta forma ideológico”, afirmó.
Esta semana, el excandidato presidencial socialdemócrata José Serra –derrotado en comicios por Dilma Rousseff y Lula– indicó claramente que abre el camino a Neves en el seno del PSDB, al afirmar que el Partido no debe tardar en oficializar su candidatura.
La candidatura de Neves, así como la del resto de los candidatos, debe ser oficializada por su partido el próximo año.
En las últimas encuestas de noviembre, Neves contaba con 19% de apoyo, mientras el socialista Eduardo Campos tenía un 11%. Rousseff, quien recuperó fuerza tras las protestas de junio, se mantiene de lejos favorita, con 47%.