Santiago (AFP).
El paro que afectaba a puertos chilenos desde hace casi un mes y que había perjudicado las exportaciones nacionales concluyó este sábado tras un acuerdo que acogió las demandas de los trabajadores, informó un portavoz de las empresas portuarias.
Un convenio alcanzado de madrugada entre el gobierno y dirigentes sindicales fue aceptado en horas de la tarde por las empresas privadas que tienen la concesión de los puertos donde se llevaban a cabo las movilizaciones.
"Nos comprometemos a materializar los dos únicos aspectos del acuerdo en que se solicita nuestra participación: la entrega de un bono portuario y uno de conflicto a cada trabajador y reintegrar en las mismas condiciones previas a los trabajadores que hayan sido desvinculados durante el periodo del paro", dijo Alberto Bórquez, vocero de la agrupación de empresas portuarias.
La demanda principal de los trabajadores era recibir el pago retroactivo de media hora diaria de descanso para alimentarse desde agosto del 2005.
De madrugada, los trabajadores habían alcanzado un acuerdo tras una reunión en la que participaron los ministros del Trabajo, Juan Carlos Jobet; Agricultura, Luis Mayol; y Transportes, Pedro Pablo Errázuziz, y el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla.
La movilización afectaba especialmente los puertos de Mejillones y de San Antonio, el ancladero que mueve mayor carga ubicado en el litoral central.
Otros puertos como el de Valparaíso, Talcahuano, Iquique, Caldera y Arica se habían unido solidariamente al paro.
La huelga paralizó gran parte de los envíos frutícolas y de cobre, mineral del cual Chile es el mayor productor del mundo con cerca de un tercio de la oferta mundial.
Las pérdidas en el sector agrícola podrían llegar a los 80 millones, según cifras del gobierno.