En entrevista con la AFP, Pérez comentó que Los Zetas, considerado el más sanguinario de los grupos criminales mexicanos, dominan dos de las tres rutas más importantes del narcotráfico en la región y disputan la tercera al cártel de Sinaloa, de Joaquín "El Chapo" Guzmán, el capo más buscado de México.
Ambas organizaciones mafiosas actúan en alianza con grupos de narcotraficantes guatemaltecos en operaciones hace varios años, dijo.
“Los trabajos de inteligencia han determinado que continúa la expansión de cárteles mexicanos a territorio guatemalteco (...). Les interesa la ruta donde ellos se van a desplazar (...), penetrar instituciones como las comisarías de la policía, fiscales o algunos jueces”, agregó Pérez, entrevistado en la Casa Presidencial.
Los Zetas controlan la ruta del norte, en el departamento de Petén, fronterizo con México, y la de la franja transversal centro-norte, que incluye Quiché, Huehuetenango -también limítrofes-, Alto Verapaz y Zacapa, junto con agrupaciones locales.
En la disputada vía del Pacífico, en el sur, coperan a su vez el cártel de Sinaloa y otras organizaciones criminales guatemaltecas.
Pérez citó informes de inteligencia según los cuales producto de esas guerras territoriales el pasado 23 de diciembre fueron asesinadas e incineradas siete personas, incluida una fiscal, en un municipio de Huehuetenango, cercano a la frontera con México.
Guatemala comparte con México casi 1.000 km de frontera, en gran parte selvática, escasamente vigilada por las fuerzas de seguridad y permeada por cientos de pasos ilegales.