Ramala, Cisjordania. AP El presidente palestino Mahmud Abbas le solicitó a Estados Unidos su participación activa en la disputa con Israel sobre la expansión de los asentamientos en Cisjordania, que amenaza con estropear las recién reanudadas conversaciones de paz para el Medio Oriente.
La suspensión parcial de 10 meses adoptada por Israel sobre la construcción de nuevos asentamientos en Cisjordania termina el 26 de septiembre y varios funcionarios israelíes han adelantado que no ampliarán el congelamiento en sus términos actuales.
Abbas dijo que se retirará de las negociaciones de paz con Israel a menos que la restricciones sigan vigentes.
El presidente palestino anunció ayer que pidió a Estados Unidos intervenir en el asunto de los asentamientos.
“El gobierno del presidente Barack Obama prometió una participación activa en las conversaciones”, dijo Abbas a los periodistas que lo acompañaron en el regreso desde Washington DC, donde la semana pasada fueron retomadas las negociaciones directas luego de un paréntesis de casi dos años.
“Estados Unidos estará presente en las negociaciones, no necesariamente a puertas cerradas, pero (los mediadores estadounidenses) pueden estar dentro del salón o afuera”, expresó Abbas.
Los asentamientos se encuentran en el territorio que los palestinos quieren para establecer un posible estado y Abbas está tomando la decisión del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu sobre la congelación como una prueba de sus intenciones.
Abbas y Netanyahu se reunirán dos veces la semana próxima, primero en el balneario egipcio de Sharm el-Sheik y luego en Jerusalén. La secretaria de Estado norteamericana Hillary Rodham Clinton asistirá a la reunión en Jerusalén.