Con el cambio en el reglamento, ¿la banca podrá negarse a abrir o cerrar cuentas si el cliente no justifica el origen de sus fondos?
La norma establece dos escenarios. Primero, cuando es un nuevo cliente que pretende abrir una cuenta y, por ejemplo, llega con $1 millón. Entonces, el banco deberá preguntar el origen de los fondos y la actividad económica. Si la persona se niega a hacer eso, ni siquiera se le abre la cuenta.
”El otro caso es cuando el cliente ya tiene la cuenta. Si la persona dijo que iba a mover $50.000 al mes y el patrón transaccional muestra movimientos de $500.000, entonces el banco llama al cliente y pregunta. Si el cliente no justifica, el banco puede cerrar la cuenta porque no se demuestra el origen de los recursos”.
¿Eso ya se hace?
Por sentido común, se debe hacer. La normativa busca que el banco tenga la responsabilidad de justificar el origen del dinero y que quede documentado. Entonces, en un caso de lavado de dinero, se podrá preguntar a la entidad por qué abrió una cuenta o la cerró y solicitar la documentación, en la cual se explica el caso.
”La norma endurece las reglas. Es una sana política de manejo de riesgo de legitimación de capitales. Si el cliente no justifica los fondos, debe cerrarse la cuenta y reportar a las autoridades que es una operación sospechosa”.
¿Por qué exigir la declaración del impuesto de la renta?
Una manera de corroborar que los ingresos de una persona o empresa son reales es mediante la declaración de renta. Es un objetivo solo para el análisis de legitimación, no es que los bancos se vuelvan auxiliares tributarios.
”Cuando alguien no quiere entregar la declaración del impuesto sobre la renta, cuidado y si no, más bien, es un tema de lavado de dinero, más si mueve grandes montos. Es una sana práctica para demostrar el origen de los fondos. Es un tema que a nivel internacional es muy utilizado”.