Lima AFP Tras una década de crecimiento, América Latina, y particularmente el prominente Brasil, refleja hoy las debilidades de las economías emergentes, siempre dependientes de los precios de materias primas que ahora se hunden.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) realizará esta semana entrante en Lima su asamblea general junto al Banco Mundial (BM), con la presencia de ministros de Economía y presidentes de bancos centrales de todo el planeta.
A la asamblea “América Latina llega en una situación vulnerable, delicada: desaceleración económica, inflación y devaluación creciente, y con el riesgo de volver a la situación de pobreza a una clase media vulnerable”, explicó a la AFP el economista peruano Jorge González Izquierdo.
Tras beneficiarse con el bum de los commodities , muchos de los países de la región fortalecieron sus ingresos, sus monedas y su producción.
Algunos ahorraron, pero otros privilegiaron el gasto. Y hoy que sus clientes, como China, les compran menos y a menor precio, aparecen las dificultades.
“El gran problema de América Latina solo actúa cuando está en crisis”, explicó el economista para América Latina de la consultora 4CAST, Pedro Tuesta.
Los más expuestos son los exportadores de petróleo, a $45 el barril, una caída del 50% de su valor desde el 2013.
En algunos casos, los ajustes inciden en programas sociales.
En Venezuela, el presidente Nicolás Maduro ha hablado de revisar el gasto público sin tocar el gasto social. No obstante, continúa aprobando créditos para gasto público, con emisión de dinero inorgánico, explicó Anabella Abadi, de ODH Grupo Consultor.
Por otro lado, varios países sufren por la debilidad de China, cuya voracidad de materias primas explica buena parte de la prosperidad latinoamericana.
Brasil, sétima economía mundial y otrora estrella de los emergentes, entró en recesión en el segundo trimestre y se espera que su PIB se contraiga este año y el que viene.
“Perú, Colombia o Chile son resilientes pero no inmunes, porque se están desacelerando, y dependientes de materias primas. México también resiste bien porque está menos conectado a China y más a Estados Unidos”, ya en recuperación, comentó Alberto Ramos, responsable para Latinoamérica en Goldman Sachs.
El eterno desafío de América Latina es dejar de ser extremadamente dependiente de las materias primas. “Deben impulsar una transición hacia un nuevo modelo de crecimiento”, dijo Alejandro Werner, jefe del Departamento América Latina del FMI.
Un desafío adicional para la región vendrá cuando Estados Unidos suba sus tasas de interés, dando un nuevo golpe a las monedas emergentes.