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Las autoridades del gobierno costarricense se reunieron este martes con los agremiados en la Cámara de Bancos e Instituciones Financieras con el fin de puntualizar temas de interés y pautas que seguirán por los próximos cuatro años.
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Los bancos también ajustaron sus precios en ventanilla y el máximo se ubicó la tarde de este martes 23 de mayo en ¢600. | ARCHIVO/A. MARÍN (albert marin)
Hacienda pública. En la reunión participaron banqueros y los representantes del sector económico de la Administración Solís, encabezados por Helio Fallas, segundo vicepresidente y ministro de Hacienda.
Fallas detalló que uno de los puntos en los que trabajará con el sector financiero es en la estabilidad de sus indicadores.
El ministro dijo que buscará respaldo del sector en la gestión de la deuda, con el fin de lograr un entorno más competitivo, mayor liquidez de las emisiones y evitar incrementos en las tasas.
El Gobierno también pidió ayuda en la generación de ahorro y canalización del mismo hacia las actividades productivas. Además, una contribución del sector para incentivar la inversión pública y privada.
Fallas resaltó que se buscará una reducción en los márgenes de intermediación financiera.
Además, el funcionario recordó la necesidad de continuar con los programas de banca para el desarrollo y apoyo a pequeñas y medianas empresas.
El Gobierno también pedirá apoyo del gremio financiero en su proyecto de exigir el uso obligatorio de tarjetas bancarias en los pagos a profesionales liberales, con el fin de tener mayores controles cruzados y luchar contra la evasión.
Supervisión financiera. Olivier Castro, presidente del Banco Central, comentó que las superintendencias financieras ya trabajan en la implementación de la supervisión de basada en riesgos, lo cual daría mayor margen de flexibilidad a las entidades financieras.
"A veces uno siente que las entidades financieras están sobrerreguladas", comentó Castro.
El jerarca de la autoridad monetaria, no obstante, recalcó que se mantendrá un énfasis de supervisión en los tres bancos más grandes del Estado, pues -por su tamaño- pueden generar por si mismos un riesgo sistémico.
Comercio Exterior. En el ramo de los intercambios comerciales el gobierno llevó al sector financiero una serie de reclamos que hacen los exportadores.
Alexander Mora, ministro de Comercio Exterior, citó algunas de estas quejas del sector productivo que exporta, entre las que señaló: altas tasas de interés, garantías y requisitos excesivos, preferencias por garantías reales, corto plazo en los pagos, poca flexibilidad en las readecuaciones y largos trámites.
Sobre estos puntos solicitó a los bancos mayor apoyo.
Sector agropecuario. Al final de la actividad, Jose Joaquín Salazar, viceministro de Agricultura, también trasladó a los banqueros las inquietudes de su ramo.
Entre las peticiones, el viceministro solicitó: adecuaciones de los créditos a los periodos productivos, desarrollo un sistema de garantías de menor costo, fondos de capital de riesgo y microcréditos.
La reunión entre banqueros y el Gobierno se llevó a acabo en el Club Unión, en San José.
