San José.
Rodrigo Bolaños, presidente del Banco Central, repitió durante un almuerzo, este martes, que el país en general debe actuar con prudencia en sus decisiones para el segundo semestre del año, especialmente luego de eliminarse las restricciones al crédito.
El llamado surgió de nuevo durante un almuerzo con asociados de la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCC). Este sector tiene uno de los periodos más activos durante el segundo semestre del año, cuando se concretan los pedidos para la Navidad y fin de año, el mejor momento del año para los comerciantes.
La exitativa de Bolaños se fundamenta en la desaceleración de la actividad económica en el país. El funcionario recordó que el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) reflejó un crecimiento del 2,63% en enero de este año y apenas subió un 1,62% en mayo anterior.
Además, el Banco Central debió revisar a la baja el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del país, del 4% inicial previsto en enero de este año a un 3% en su revisión del programa macroeconómico presentada el 31 de julio. Esto se debe especialmente a notables bajas en el sector agropecuario y en la industria manufacturera.
Aparte de eso, Bolaños llamó la atención acerca de la dependencia del país de los mercados externos, lo cual se refleja en una desaceleración en el crecimiento de las exportaciones durante los últimos meses.
El presidente de la Cámara de Comercio de Costa Rica, Francisco Llobet, afirmó que este sector está preocupado por las medidas que tomará el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) en lo relativo a los préstamos en dólares para usuarios que no son generadores de ingresos en esa moneda. Las medidas que restringirían la emisión de créditos en la divisa estadounidense se anunciarán en los próximos días.
Bolaños explicó al respecto que todo tiene su precio y que esas medidas se tienen que ver como un seguro ante eventuales impactos de decisiones externas, particularmente de Estados Unidos, sobre el precio del dólar en el país y las tasas de interés en esa moneda.
Las posibles limitaciones al crédito en dólares podrían afectar las compras del sector comercio en el exterior para la época navideña, reconoció Llobet.