Nueva York (AFP). La ayuda pública al desarrollo descendió debido al efecto de la crisis económica haciendo todavía más difícil alcanzar los objetivos globales para reducir la pobreza, señala un informe de Naciones Unidas publicado hoy jueves.
Tras haber alcanzado un récord en 2010, la ayuda disminuyó casi 3% en 2011, a $133.500 millones, indicó el estudio. La diferencia entre la ayuda recibida y las sumas prometidas para conseguir los Objetivos del Milenio para el Desarrollo (OMD) se sitúa en $166.800 millones.
A este ritmo, los OMD fijados por la ONU en 2000 sólo podrán ser cumplidos para el plazo estimado de 2015 en una cantidad limitada de países, adviertieron los expertos de la ONU.
Los miembros del grupo de reflexión sobre los retrasos de los OMD recomiendan a los donantes que, por su propio interés, aumenten las ayudas pese a las restricciones presupuestarias.
En una economía mundializada, defienden, tanto los países pobres como ricos "da igual si se dan cuenta o no, dependen a partir de ahora los unos de los otros".
Un fuerte crecimiento en los primeros abriría mercados en sus vecinos desarrollados, lo que disminuiría los flujos migratorios.
Sector por sector, los objetivos de la ONU para la pobreza, el agua, los barrios marginales y la igualdad entre hombres y mujeres en la enseñanza primaria han sido cumplidos.
Además, existen progresos significativos en el acceso a la enseñanza primaria y la disponibilidad de los tratamientos del VIH.
Sin embargo, de los 23 países miembro del Comité de Ayuda al Desarrollo de la OCD, 16 redujeron su contribución en 2011 como consecuencia del descenso de las partidas presupuestarias a raíz de la crisis económica.
En este sentido, las reducciones más importantes se registraron en Grecia y en España, seguidas por Austria y Bélgica.
Sólo Suecia, Noruega, Luxemburgo, Dinamarca y Holanda continuaron con una contribución superior al objetivo fijado (0,7% del PIB).