El sector privado es el responsable de imprimirle dinamismo a la construcción, mientras que la obra pública aparece rezagada.
Así se desprende de la tasa de variación interanual del índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) en noviembre del 2013, último registro que se tiene.
Según datos de la Cámara de la Construcción, en el índice mensual de la actividad económica del sector, la tasa de la obra pública decreció en noviembre pasado 5,6% y la privada creció 4,5% en relación con octubre del 2013.
Aún así, la construcción con destino privado muestra signos de desaceleración. Por ejemplo, para enero del 2012 el crecimiento de la construcción privada representó un 8,8% en relación con diciembre del 2011.
“Necesitamos un gobierno con política clara en construcción de obra pública, créditos de vivienda y apoyo en la mejora de trámites”, dijo el presidente de la Cámara, Guillermo Carazo.
Tanto a él como al director ejecutivo de la Cámara, Randall Murillo, les sorprende que el Gobierno no desarrolle proyectos de infraestructura aún siendo el último año de la administración Chinchilla.
Incluso piden que se ejecuten de una vez por todas, los $1.68 millones aprobados por los diputados para el desarrollo de obra pública, lo que están exigiendo hace tres años. Temen que no se logre antes de mayo.
La Nación le consultó al vicepresidente Luis Liberman, pero dijo mediante una encargada de prensa, que no se podía referir al tema sin tener cifras de Hacienda en mano. Se comprometió a brindar hoy su posición.