En los 15 años que tiene de funcionar en Costa Rica, la certificación de sostenibilidad turística (CST) ha acreditado a 618 empresas, de las cuales solo 337 mantienen la distinción.
Este sello, otorgado por el Instituto Costarricense de Turismo (ICT), nació con la finalidad de ofrecer un servicio al ecoturista que en ese momento visitaba el país.
¿Por qué dejan ir los negocios esta certificación? La respuesta estaría en la ausencia de personal que dirija la gestión de sostenibilidad y, en muchos de casos, en la falta de presupuesto.
“Cuando llamamos a las firmas después de los dos años que dura la certificación, nos comunican diversas razones para no entrar de nuevo en el proceso de acreditación”, dijo Virgilio Espinoza, representante del ICT.
La otra cara de la moneda son aquellas empresas que decidieron mantener sus esfuerzos con el objetivo de apoyar el fin por el que fue creado el sello, y a su vez, gozar de sus beneficios.
Encadenamiento. En la lista de 337 firmas que en la actualidad conservan la certificación, se encuentran nombres como el hotel Courtyard by Marriott San José Airport Alajuela, Britt Coffee Tour y los rent a car Alamo, National y Enterprise.
La primera de esas empresas recibió la acreditación en marzo del 2014 y decidió optar por ella debido a que el hospedaje se desarrolló bajo una línea de cuidado del ambiente y de impactar de forma positiva a la comunidad.
Para ese complejo hotelero, el mayor beneficio surge de estar alineados con el objetivo del país para obtener la carbono neutralidad y pertenecer a un grupo selecto de establecimientos de alojamiento que asumen un compromiso con el planeta.
“Cada día son más las firmas que buscan alinearse con estos compromisos ecológicos de cuidado ambiental y social. Estas intentan crear asociaciones estratégicas con compañías como la nuestra; por lo tanto, hay una atracción de negocios por medio de estas alianzas”, señaló Marco Quintero, gerente general.
Por su parte, el Britt Coffee Tour obtuvo la certificación en el 2012 y la considera como una acción que respalda las prácticas de la empresa nacional Britt para generar un impacto positivo en sus clientes y en los poblados en donde opera.
Sin embargo, también es consciente de que el reconocimiento genera alianzas importantes en el bloque del sector turismo y fortalece la imagen corporativa.
“Más allá de aumentar la visitación al Coffee Tour, más bien ha fortalecido la imagen, la seguridad y la confianza de los turistas que nos visitan”, resaltó el CEO de la firma, Pablo Vargas.
En el caso del Grupo ANC (con sus tres marcas de rent a car, Alamo, National y Enterprise) también fue certificado en el 2012 y su principal motivación fue usar los lineamientos de la CST para gestionar la sostenibilidad y aprovechar los beneficios e incentivos.
“A nivel de negocios, el principal beneficio es el reconocimiento que hace el ICT otorgando descuentos en las ferias en que participamos. Algunos clientes se ven atraídos porque también participan en el programa o tienen políticas corporativas para seleccionar proveedores con prácticas certificadas de sostenibilidad”, explicó Mariela Astúa, jefa de Calidad de Ambiente.