Productos como los textiles, capullos y follajes están en un proceso de declive en la oferta exportable de Costa Rica.
Por el contrario, ganaron terreno bienes como un mayor componente tecnológico, como los circuitos integrados y dispositivos médicos, según el Decimonoveno Informe Estado de la Nación en Desarrollo Humano Sostenible .
El estudio analizó la oferta exportable de la primera década del siglo XXI.
La investigación encontró que hay un grupo de productos definidos como “oportunidades perdidas” y “retiradas”, que fueron casi el 30% de las ventas del país en el periodo de 2000-2005. Pero en el lapso 2005-2010 eran el 15%.
Por su parte, los bienes denominados “estrellas crecientes”, que tienen un fuerte contenido tecnológico, eran el 10,6% de las exportaciones entre 2000-2005 y subieron al 54% en 2005-2010.
“Hay un grupo de productos bien posicionados dentro de zona franca. Pero fuera el desempeño no es el mismo y no logran entrar dentro de la oferta exportable”, dijo Karla Meneses, investigadora del Estado de la Nación .
Por sectores, el primario –ligado a la agricultura– cedió más cuota de mercado. El año pasado representó una cuarta parte de las exportaciones, frente a casi el 60% de 1990 , según el estudio Desempeño exportador y heterogeneidad estructural en Costa Rica, en el cual se basó el Estado de la Nación para su análisis.
Hoy, es la industria intensiva en tecnología la que lidera las exportaciones. Ese sector representa casi el 60% de las ventas de productos en 2012.
“Los países van ganando o perdiendo participación en los mercados internacionales de ciertos productos o sectores, según sea su orientación productiva”, aseguró Anabel González, ministra de Comercio Exterior (Comex).
Añadió que lo importante es evolucionar hacia productos o servicios de mayor sofisticación.
Enfrentar competencia. Folkert Hoestra, propietario de Orquídeas Costarricenses, está entre los empresarios que afrontó la baja del sector de plantas, flores y follajes.
El ajuste, comentó, se hizo con la introducción de nuevos productos, como las bromelias, alianzas con empresas extranjeras, procesos eficientes y ajuste de personal.
Pero no todas las compañías se adaptaron tras la caída del 20% en las ventas en el último lustro, según los datos de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).
“Antes vendíamos productos tropicales y tradicionales de buena calidad a excelentes precios. Con la apertura comercial hay más países exportando lo mismo. Hay más competencia”, destacó Mónica Segnini, presidenta de la Cámara de Exportadores de Costa Rica.
La industria de baja tecnología, como la textil, tampoco consiguió sortear la competencia. Este sector significó el 2,6% de las exportaciones de zona franca el año pasado. Pero fue el 13% en el 2000.
Miguel Schyfter, presidente de la Asociación de Exportadores de la Industria Textil, atribuye dicho comportamiento al aumento de los costos de producir en Costa Rica.
Para Gabriela Llobet, directora general de la Coalición Costarricense de Iniciativas del Desarrollo (Cinde), es desafortunado que el país perdiera competitividad en sectores de poco valor agregado.
“E desafío es continuar capacitando a la mano de obra para insertarse en los empleos de sectores en crecimiento”, expresó Llobet.
Sin embargo, este sector pujante, y en su mayoría instalado en zona franca, está desconectado de la mayoría de las empresas locales, según el Estado de la Nación . Colaboró Marvin Barquero