En este mismo período, las pequeñas empresas se mantuvieron estables y apenas crecieron 4%, al pasar de 11.000 a 14.000.
Los datos provienen de la información suministrada por el directorio de Unidades Institucionales y Establecimientos (DIEU) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), el Ministerio de Economía, Industria y Comercio y la Dirección Actuarial y Económica de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).
Para Montero, es muy importante analizar el ritmo de crecimiento de ambos sectores, sobre todo, por la generación de empleo y por el desarrollo que brindan a las comunidades.
El estudio también analiza las características del microempresario, según las cuales el 60% son hombres que rondan los 40 años. Además, que la gran mayoría posee casa propia y no tienen un salario fijo, pero laboran en promedio 60 horas por semana. Una buena cantidad se encuentra inscrito a la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y emplea como máximo a tres personas.
Con respecto al acceso al crédito, un 65% de los microempresarios consultados manifestó que nunca ha solicitado uno. Entre las principales razones destacan el no tener deudas, excesiva tramitología y altas tasas de interés. Del 35% de los que sí han querido sacar un financiamiento, solamente 85% lo ha conseguido.