La inflación repuntó en los últimos 12 meses y se metió dentro del rango meta del Banco Central, que es entre 2% y 4% para este año y para el 2018.
De acuerdo con los resultados que publicó la mañana de este martes 7 de noviembre el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la variación interanual (entre octubre del 2016 y octubre del 2017) del índice de precios al consumidor, alcanzó un 2,33%.
La variación interanual de octubre es la más alta en los últimos dos años y medio. VEA: gráfico.
Solo en octubre, la variación fue de 0,56% respecto al mes anterior, y en los últimos 10 meses (enero a octubre), alcanzó un 1,93%.
Según el comunicado del INEC, durante octubre los bienes y servicios que mostraron un mayor efecto positivo sobre el indicador (por su aumento y la importancia en el presupuesto de los hogares) son: servicio de agua, gasolina y servicio de electricidad.
Por otra parte, automóvil, bebidas gaseosas y piña figuraron entre los rubros con mayor efecto negativo.
Importancia de estar en el rango
El hecho de que la inflación esté dentro del rango meta del Banco Central tiene implicaciones para la política monetaria del Banco Central, que impacta las tasas de interés.
“Es importante que la inflación esté dentro del rango meta, porque uno de los requisitos para consolidar las metas de inflación, es que los agentes económicos crean en la gestión de las autoridades monetarias”, explicó el economista Manuel Zúñiga.
En el sistema de metas de inflación se define un valor y toda la política se ajusta para alcanzarlo.
Zúñiga añadió que también es importante esta sintonía porque en la medida en que la inflación se ubique en los rangos establecidos, minimiza las intervenciones del Banco Central sobre los agregados monetarios, para realinear el comportamiento de los precios hacia los valores esperados.
“Entre menos intervenga el Banco Central, menos presiones al alza se observarán en las tasas de interés, y esto es bueno, tanto para el sistema financiero, como para los agentes económicos”, añadió Zúñiga.
El reto que tiene ahora la entidad es sostener el indicador dentro del rango meta.
"De momento no se observan presiones que puedan poner en riesgo el logro de ese objetivo, a pesar de eventos coyunturales, como los huracanes Irma y la tormenta Nate, que han presionado al alza los precios de productos regulados, particularmente combustibles y alimentos agrícolas", comentó el economista Alberto Franco.
Zúñiga prevé que el impulso que tomó la inflación podría continuar el resto del año si sucedieran algunas situaciones, por ejemplo, si quedan efectos de la tormenta Nate en algunos productos, los cuales todavía no se reflejen en los precios finales; si ocurre algún ajuste al alza en los precios regulados, y si el precio de los transportes mostrara algún otro ajuste al alza.
Franco también consideró que podrían haber más secuelas de la tormenta Nate que podrían tener influencia sobre la producción y el precio de algunos alimentos agrícolas.
"En los próximos meses, también, observaremos, primero, el impacto del aumento reciente en las cotizaciones internacionales de los combustibles (Recope tendrá que solicitar un incremento en precios locales en estos días, que regirá en Diciembre), y, otra alza en el precio de combustibles, esta vez por reconocimiento de los costos de la convención colectiva de Recope", señaló Franco.
El repunte en la inflación tiene implicaciones para los trabajadores, pues si los salarios nominales se mantienen, entonces enfrentan una reducción en el salario real (el que define el poder de compra); e inclusive para los ahorrantes, pues si no hay cambios en las tasas de interés nominales, significa que sus rendimientos reales disminuyen.
El índice por sí mismo, además, impacta otros indicadores como, por ejemplo, el impuesto a los combustibles y los ajustes en los alquileres.