¿Qué opina de la decisión de la Caja de acortar el estudio acturial?
Muestra un esfuerzo desesperado por ocultar información. Cuando se omiten datos uno no puede evaluar los resultados, ni tampoco la calidad, porque los supuestos no están.
El director actuarial de la CCSS dice que los datos, para cada estudio, cambia y puede no concordar con los otros.
Puede pasar, pero tiene que concordar con la realidad. No podemos entender de dónde surgen las estimaciones demasiado bondadosas para un régimen que no muestra esos indicadores. La razón es que todo quedó oculto. De un informe, el año anterior, de 162 páginas, se pasa a uno de 33 páginas.
El documento indica que por interpretaciones incorrectas reducen el estudio.
Si creen que eso es cierto, deberían corregir las interpretaciones erróneas. Decir que ‘porque me van a criticar prefiero no presentar los datos’ es dar la razón a quien los critica.
¿Ayuda, al debate del IVM, el nuevo estudio?
Cuando uno tiene un problema, la única forma de solucionarlos es aceptando que tiene un problema. Pero ellos, en lugar de sentarse a discutir, lo que hacen es echar el polvo debajo de la alfombra. Esa alfombra cada vez está mas llena.
¿Hay transparencia?
De este informe, no. Me parece inconcebible que una Junta Directiva apruebe este informe, si no cumple con la transparencia y parámetros actuariales internacionales. No se explican los cambios, ni las hipótesis demográficas usadas, ni presentan las cifras. Eso es elemental.
¿Es posible con este informe revisar el régimen?
No. Este informe no tiene ninguna utilidad para tomar una decisión. Exigiremos a la Caja que dé y publique, en su web, toda la información que fue la base para hacerlo.