La misión gubernamental que viajó a Washington para conversar con los organismos internacionales sobre los préstamos que el país mantiene pendientes se encuentra en apuros, pues en las evaluaciones hechas hasta ahora Costa Rica incumple con muchos de los requisitos.
Según explicó ayer desde esa ciudad el Ministro de Hacienda, Fernando Herrero, con el Banco Interamericano está pendiente cerca del 50 por ciento de los requisitos para iniciar el desembolso de $100 millones del Programa Sectorial de Inversiones y $80 millones del Programa de Ajuste del Sector Público.
Estos dos préstamos forman parte del Tercer Programa de Ajuste Estructural, conformado por cuatro créditos; el del Banco Mundial se perdió a principios de este año.
La principal traba con el BID, de acuerdo con Herrero, es que el país no cuente con un convenio con el FMI; si esto no sucede antes de noviembre se malograrían esos dos créditos.
Sobre el acuerdo con el Fondo, el jerarca de Hacienda comentó que ayer mantuvieron reuniones con funcionarios de este organismo, a los cuales les resultó incompresible que el país todavía no logre un acuerdo sobre las leyes tributarias.
Meta fiscal
El criterio de Herrero es que si no se aprueban los impuestos, el país tendría que ejecutar fuertes ajustes (que no sean impuestos) para alcanzar la meta propuesta de déficit fiscal. Para el economista Thelmo Vargas es muy difícil que el déficit pueda ser menor al 5 por ciento, debido a la indefinición de las medidas para atacarlo. Sin embargo, no cree que el FMI ceda en este asunto.
En opinión de Francisco Sancho, director de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional, es factible lograr la meta de un déficit fiscal del 3,5 por ciento del PIB a diciembre.
Manifiesta que el problema fundamental que afronta el Gobierno, en aras de cumplir con dicha meta, es poder ejecutar el despido de 5.000 funcionarios públicos como parte del plan de reducción del gasto público en ¢32.000 millones.
En las reuniones de ayer en Washington no se planteó ante este organismo la posibilidad de renegociar la meta propuesta de déficit fiscal o alguna de las condiciones. No obstante, para hoy se podría solicitar una reprogramación del compromiso en cuanto a reservas monetarias internacionales (lograr un incremento de $150 millones en el período del convenio, de junio de 1995 a diciembre de 1996), dada la caída que éstas han experimentado.