Los inversionistas extranjeros ya le están cobrando al país su deterioro fiscal, al demandar mayores rendimientos en los bonos.
El ministro de Hacienda, Helio Fallas, considera que ha habido mala información y espera que retorne la calma.
Desde junio pasado, ha subido el porcentaje adicional de rendimiento que los ahorrantes foráneos exigen a los títulos valores del Gobierno costarricense respecto a los bonos del Tesoro de Estados Unidos (la llamada prima por riesgo o margen).
Por ejemplo, en el bono costarricense que vence en el año 2023 la prima por riesgo pasó de 2,10% a 2,56% entre junio y setiembre.
“Esto sucede porque los mercados internacionales se adelantan a los eventos y los inversionistas no necesitan ver materializado el mayor riesgo en una rebaja de calificación soberana para darse cuenta de que los bonos de Costa Rica se han vuelto más riesgosos”, explicó Adriana Rodríguez, jefa de Estrategia de Aldesa.
Una opinión similar expresaron Douglas Montero, analista internacional del puesto de bolsa Mercado de Valores, y Carolina Martínez Gómez, gerente de Portafolios de Inversión de Banco Lafise.
“El mercado ha venido descontando la posibilidad de una disminución en la calificación de riesgo de Costa Rica. Si se observan otros bonos con similar calificación de riesgo, se nota un mayor spread (margen) en los bonos de Costa Rica, lo que sugiere una mayor prima por riesgo”, comentó Martínez.
Rodríguez llamó la atención de que, actualmente, para un inversionista es más seguro invertir en un bono de Guatemala con vencimiento en el año 2022, para el cual exige una prima por riesgo de 1,56%, que en uno de Costa Rica con vencimiento al año 2020, por el cual la prima es de 2,64%.
La semana pasada, el Ministerio de Hacienda presentó el presupuesto ordinario a la Asamblea Legislativa para el 2015 que contiene un déficit para el Gobierno equivalente a un 6,7% de la producción esperada y las agencias que califican el riesgo de la deuda costarricense lanzaron alertas.
Fitch emitió un comunicado en el cual advirtió del deterioro fiscal a los ahorrantes.
Fallas comentó ayer que en su gira por Washington conversó con dos agencias, Fitch y Standard & Poor’s. La primera reconoció que no contaba con suficiente información al emitir el comunicado.