El rendimiento real que registran los fondos de pensión complementaria viene en caída desde noviembre del 2013 debido a los ajustes en las tasas de interés locales.
Varias de las operadoras que administran los recursos del régimen obligatorio de pensiones (ROP), explicaron a La Nación que la expectativa de mayores intereses redujo el valor de las inversiones y eso se tradujo en menor rentabilidad.
El 2013 fue un año positivo, pues se registraron rendimientos reales (al descontar el efecto de la inflación) hasta del 15,5% anual, según datos de la Superintendencia de Pensiones (Supén).
Sin embargo, ninguno de los seis administradores de los portafolios que operan en el país pudo esquivar el golpe posterior. Para julio pasado, el fondo con rendimiento más bajo obtuvo 0,46% y el más alto, 1,56%.
El descenso reportado tuvo una pausa en junio pasado, pero en julio volvió a caer. Ahora ese nivel es similar al que existía a mediados del 2012.
Las ganancias de los fondos provienen de las inversiones que hacen las operadoras con los recursos de los afiliados, tanto los que hay acumulados, como los que ingresan todos los meses.
Los administradores de estas inversiones insisten en que además de los rendimientos anuales se deben observar los históricos, pues los planes de retiro son productos que, en muchos casos, se harán efectivos en el largo plazo.
Efecto inverso. En Costa Rica, las operadoras invierten en bonos de deuda que tienen un rendimiento fijo, principalmente. Estas entidades tienen la obligación de reportar diariamente esas inversiones a precios de mercado; es decir, el valor al que se cotizan los bonos en ese momento.
Con este mecanismo, cuando en el mercado suben las tasas de interés, los precios de los títulos bajan, pues estos ya no pueden ajustar sus rendimientos una vez que fueron emitidos.
Cuando esos precios de mercado disminuyen, los fondos de pensiones tienen que reportar los títulos con un menor valor y esto termina por afectar el rendimiento de forma negativa.
No obstante, esa valoración es un efecto que solamente se refleja en los informes contables, siempre y cuando las operadoras no hagan las ventas de esos bonos.
Alejandro Solórzano, gerente de la operadora Vida Plena, explicó que la caída de los rendimientos se debe, en parte, a que existe una expectativa de un incremento mayor en las tasas de interés.
Además, en el momento que eso ocurre, los gestores de portafolio destinan una parte de sus recursos a inversiones de corto plazo; la consecuencia son menores intereses.
El objetivo de esa estrategia consiste en tener disponibilidad de dinero para cuando suban las tasas, entonces el fondo procede a comprar bonos a precios relativamente bajos y con un mejor rendimiento, añadió Solórzano.
El gerente de BCR Pensiones, Mauricio Rojas, coincidió en que el efecto de la valoración a precios de mercado es la principal razón de la baja en rendimientos.
Para él, la valoración afecta, principalmente, a los bonos que son de mediano y largo plazo, que son los que tienen entre sus activos los fondos de pensión.
Héctor Maggi, gerente general de la operadora de la Caja Costarricense de Seguro Social, explicó que la caída es un efecto temporal, por lo que de mantenerse la tendencia de incremento en las tasas de interés, poco a poco el rendimiento volverá a porcentajes superiores.
Maggi insistió en que las inversiones de estos fondos son renovadas constantemente, así que dentro de un tiempo las mejores tasas se verán reflejadas en los rendimientos. Pero, advirtió de que el proceso puede tomar varios meses.
Junto con esta baja en los rendimientos también se incrementó la libre transferencia de afiliados de una operadora a otra, pues en junio se trasladaron 2.954 personas y para julio la cifra aumentó a 4.193.
Ejecutar un traslado en un periodo de rendimientos bajos podría provocar que la persona se lleve menos dinero pues, para liquidarlo, su operadora debe vender los bonos al precio de mercado que tengan en ese mismo momento.