El Gobierno es para la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) el mayor deudor del Régimen No Contributivo (RNC) de pensiones.
Al cierre del 2015, las cuentas por cobrar al Poder Ejecutivo con el fondo especial eran por ¢201.400 millones, según los estados financieros del régimen.
Para la institución autónoma, el 93% de los recursos corresponde a un saldo acumulado de la recaudación del impuesto sobre las ventas no trasladado al régimen.
El restante 7% se distribuye entre tributos a los cigarrillos y licores y giros pendientes de patronos privados.
El RNC atiende la necesidad de amparo económico de personas –en su mayoría ancianos– en extrema pobreza y que no tienen derecho a jubilarse en otro régimen de pensiones.
Mauricio Arroyo, subtesorero nacional del Ministerio de Hacienda, aseguró que la Caja y el Gobierno Central están en proceso de realizar una conciliación del monto adeudado a la institución autónoma.
Tal análisis incluye, además de los recursos del RNC, la deuda que el Gobierno aún posee con el Seguro de Enfermedad y Maternidad (SEM).
“Actualmente, se realizan esfuerzos por conciliar los montos realmente adeudados por el Gobierno a dicha entidad y en los casos conciliados se efectúan acuerdos para hacer efectivos los pagos. Dado el proceso de conciliación en el cual se está, no es posible dar cifras al respecto”, enfatizó Arroyo.
Jaime Barrantes, gerente de Pensiones de la CCSS, explicó que en el 2009 hubo un cambio en la Ley de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares que creó el RNC y varió el cálculo de los aportes al régimen.
“La interpretación del Gobierno es que ellos ponen una meta (de beneficiarios atendidos) y trasladan los recursos necesarios para atender esa meta”, aseguró Barrantes.
Sin embargo, el jerarca dijo que la deuda dejó de crecer tras el cambio legal, pero aún mantienen las cuentas por cobrar.