Si usted es de los clientes que siguen los resultados de los bancos, debe tener cuidado al valorar los del primer bimestre de este año.
El incremento en el precio del dólar provocó grandes altibajos en las ganancias bancarias que no obedecen necesariamente a la gestión de las entidades, sino más bien a efectos contables.
Las entidades que tienen más activos en dólares (tenencias, como créditos) que pasivos (deudas, como depósitos de ahorrantes) registraron mayores alzas en sus ganancias. Por lo general, se trata de los bancos privados.
Las utilidades finales de estas instituciones casi se triplicaron en los primeros dos meses del 2014 respecto al mismo periodo del 2013, al pasar de casi ¢10.000 millones a unos ¢29.000 millones.
Esto obedeció, sobre todo, a que, al pasar su patrimonio (activos menos pasivos) a colones, este aumentó debido al alza en el dólar y eso generó lo que se llama una ganancia de capital que no necesariamente se materializa.
Es como si una persona tuviera $100 que compró a ¢500 y al subir el precio del dólar a ¢540 registra una ganancia de capital.
No obstante, esa utilidad no se hace realidad si la persona no vende esos $100 a ese valor.
Una situación parecida sucede con los bancos y por eso el presidente del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero, José Luis Arce, advirtió de que se debe tener precaución cuando se valoran los datos.
“Son ganancias de naturaleza contable, no son porque sean ahora más eficientes, ni porque sean más efectivos en lo que están haciendo, es simplemente por tener dos monedas en su balance”, explicó el jerarca.
En el caso de los bancos públicos, generalmente tienen, en promedio, menos dolarizado su patrimonio y, por lo tanto, este efecto es más pequeño.
Las ganancias de estas instituciones cayeron 53% en el primer bimestre de este año respecto al mismo periodo del año anterior.
Gerardo Corrales, gerente del BAC San José, explicó que la situación cambia si se resta el efecto cambiario y los impuestos, y queda lo que se llama la utilidad operativa.
En el resultado de los públicos tuvo un fuerte peso la reducción en las utilidades del Banco Nacional.
Bernardo Alfaro, subgerente general de Riesgo y Finanzas de esa entidad, destacó que, además del efecto cambiario, también influyó que en el 2013 se produjo una devolución de impuestos por ¢6,500 millones, que no ocurrió este 2014.
El superintendente general de Entidades Financieras, Javier Cascante, indicó que los números de meses puntuales se deben ver con cuidado y por eso recomienda analizar los datos en el tiempo.
Mario Rivera, gerente del Banco de Costa Rica, añadió que se debe hacer un estudio global donde se consideren más indicadores, tales como ingresos y morosidad, y señaló que cada banco presenta una situación particular.