El creciente deseo de tomar una excelente taza de café o acompañar una cena con buen vino, así como saborear y reconocer la calidad de otras bebidas: té, whisky y cerveza, genera un negocio rentable para centros de formación.
Estas escuelas ofrecen cursos libres introductorios, intermedios y para profesionales.
El centro de formación Kaba Coffee Center, ubicado en La Uruca, San José, brinda cursos libres y básicos sobre barismo , tueste y cata.
El lugar es liderado por Kattia Barrantes y Laura Aguilar. Además, trabaja con ellas la barista bicampeona nacional 2009-2010, Auren Chacón, quien ocupó también el lugar 12 en el World Barista Championship.
“Con esta iniciativa pretendemos crear un espacio para los amantes del café. Ofrecemos cursos profesionales certificados por el Instituto del Café, pero también clases libres de bebidas tanto frías como calientes”, dijo Barrantes.
José Solís, representante de la Asociación de Cafés Finos, señaló que ellos también tienen curso básico todos los meses, para enseñar sobre la calidad del café y el uso de las máquinas.
Gusto por el vino. Según la enóloga y directora de la Escuela del Vino, Carmen de Aguirre Márquez, hay mayor demanda de personas que quieren saber del vino y café, pero también de cerveza, té y chocolate.
“La gente entendió que degustar el vino y el café es una cultura y por eso quiere aprender sobre el color, aroma y sabor para diferenciar la calidad”, destacó. A los cursos asisten doctores, constructores, ingenieros, cocineros, publicistas y amas de casa, añadió De Aguirre.
Paulina Anex-dit-Chenaud, enóloga de Puro Vino, que imparte clases en el Centro Gastronómico de Sabores, afirmó que el vino y otras bebidas siguen siendo desconocidas para muchas personas y por eso asisten a cursos y catas.
“Más importante que saber de dónde viene el vino, qué tipos de uvas, ahora las personas quieren saber con qué lo acompaño, cómo se sirve y cómo lo guardo”, explicó.
Andrés Marzuela, sumiller de Divino by Delika, destacó que los cursos menos demandados son los del té, por asunto de cultura, y los de coctelería, por su alto costo.