Lodz, Polonia. No hace mucho tiempo atrás, la única forma en que un joven polaco como Piotr Wegielewski podía encontrar un empleo digno de sus dos maestrías habría sido saltando a uno de los vuelos económicos desde el aeropuerto cercano a esta localidad para viajar a Europa Occidental.
Ahora, Wegielewski, de 29 años, encontró un empleo cerca de casa en una industria que se ha convertido en uno de los mayores empleadores en Polonia: la tercerización u outsourcing . Él es líder de proyecto en datos y análisis de sistemas para Infosys, el gigante indio de tercerización con una gran oficina aquí que brinda servicio a clientes en Ámsterdam, Londres y Nueva York, entre otras capitales de negocios.
De hecho, Lodz, ex centro de manufactura textil con una población de aproximadamente 740.000 personas, es apenas una de varias ciudades polacas que se han convertido en centros de servicios para una clientela corporativa de tipo internacional que valora a la bien educada fuerza laboral, con frecuencia bilingüe.
En ciudades medianas como Breslavia y Gdansk, los polacos están desempeñando trabajo contable, de administración y finanzas no solo para empresas de tercerización indias como Infosys, Wipro y Tata Consulting Services, sino también para grandes corporaciones como IBM y bancos que incluyen al Citigroup y el Bank of New York Mellon.
Trabajan unas 110.000 personas en lo que se conoce ampliamente como la industria de servicios de negocios en Polonia. La categoría incluye a empresas de tercerización como Infosys, que asumen el control de funciones tales como finanzas o tecnología informática para clientes, así como bancos y otras empresas que montan operaciones internas para hacer su propio trabajo administrativo.
Los servicios empresariales forman parte de la explicación sobre el constante crecimiento económico de Polonia en años recientes, incluso en medio del estancamiento en la eurozona de 17 naciones, el mayor mercado del país.
Parte de la ventaja de Polonia radica en el hecho que aún no se suma a la unión de la divisa del euro. Su divisa, el zloty, ha estado relativamente estable contra las divisas mundiales en reserva del 2013.
Sin embargo, la altura envidiable de Polonia es, sin embargo, precaria. Enfrenta la creciente competencia de otros países en el oriente europeo, como Bulgaria y Rumania, así como enclaves educados en otras partes, como España. Es por ello que especialistas de la industria dicen que Polonia debe pasar a servicios más sofisticados, como investigación y desarrollo, para seguir atrayendo inversión.
“El interrogante para Polonia es, '¿Cómo asciendo por la cadena de valor?'”, dijo Peter Schumacher, director ejecutivo del Value Leadership Group, consultoría de administración con sede en Fráncfort, Alemania, y Nueva York. “¿Cómo puedo ir del trabajo de manejo de procesos básicos al trabajo creativo más sofisticado?”
Wegielewski pudiera representar al tipo de polaco más que listo para ir más alto. Tiene maestrías de la Universidad de Lodz en administración y en econometría, híbrido de economía y matemáticas. Eso lo vuelve apropiado para supervisar a un equipo que suministra servicios a la industria del menudeo.
Sin embargo, en este tema hay pendientes. Los costos laborales en Polonia para gente con las habilidades necesarias para servicios de negocios equivalen aproximadamente a la mitad de los de Europa Occidental, aunque siguen siendo casi el doble de los de India.
Incluso empleados de nivel administrativo en Polonia perciben sustancialmente menos que sus homólogos en Estados Unidos o Europa Occidental, al tiempo que ofrecen niveles comparables de competencia, destacan analistas. Un administrador contable en Polonia percibe en promedio 44 por ciento de la paga de su igual estadounidense y 41% de la de un administrador contable en Alemania, con base en la consultoría del Grupo Hackett.
No todos los trabajadores en Infosys en Lodz son polacos, en tanto la operación brinda servicios a clientes fuera de de Europa, incluyendo Estados Unidos y Canadá.
En el caso de Polonia, su futuro en servicios de negocios sigue pareciendo brillante, pese a la competencia mundial. Jacek S. Levernes, presidente de la Asociación de Líderes del Servicio de Negocios, grupo de la industria polaca, pronosticó que el sector sumaría entre 15.000 y 20.000 empleos cada año. En últimas fechas, bancos y fondos de inversión, bajo presión regulatoria e impacientes por reducir costos, han estado creando centros en Polonia.
“En verdad es una gran reserva de graduados altamente motivados”, dijo Martin Ring, director administrativo en Polonia del Bank of New York Mellon, que tiene un centro en Breslavia con 350 personas. “Ellos son capaces de captar habilidades financieras muy rápidamente”.
Sin embargo, Schumacher del Value Leadership Group dijo que el siguiente objetivo para Polonia debería ser un eslabón más alto en la cadena de valor: para que los polacos establezcan a sus propios proveedores de servicios de negocios a fin que el país dependa menos de los caprichos de inversionistas extranjeros.
“Es ahí donde está el futuro”, dijo.