Las carreras de administración de empresas son muy pobladas. Me pregunto cuántos de los jóvenes que se enrolan en ellas tienen alguna idea de qué se trata.
Primero hay que aclarar que la buena gestión de empresas no se circunscribe a las empresas con fines de lucro. También requieren ser bien gestionadas todas las entidades de acción, las iglesias, las universidades, los servicios de policía, los partidos políticos, los clubes deportivos, los ministerios y desde luego, la tan apetecida casa presidencial.
¿De qué se ocupan los administradores de empresa? Algunos son procesadores de papeles, o de información digitalizada. Pero esto es lo accesorio, lo secundario del ejercicio profesional. Casi siempre que vemos a los administradores trabajando, los vemos haciendo lo accesorio. Lo fundamental tiende a ser invisible.
¿Y qué es lo fundamental de una buena gestión? Primero, construir la visión entusiasmante de lo que se quiere que llegue a ser la empresa. Luego elegir entre múltiples objetivos, aquellos que estén alineados con esa visión. Luego organizar los procesos productivos, que no son solo los procesos fabriles, a fin de que aquellos objetivos, se alcancen de manera óptima.
La sociedad pone en manos de las empresas talento humano, know how , equipo, edificios, tierras. De su buena gestión dependen elementos importantes de la convivencia. Depende de ello, la productividad, estrechamente relacionada con el bienestar; la disponibilidad de bienes, servicios e innovaciones; las contribuciones relacionadas con la responsabilidad social –impuestos, cumplimiento de la legislación social, apoyo a emprendimientos, desarrollo personal–. Y también es señal de una buena gestión de conducción de las empresas, la transformación de sus procesos a fin de que no solo detengan el deterioro del ambiente sino que se embarquen en cruzadas de restauración de los daños que le hemos causado.
Ya pueden ir tomando nota los jóvenes que se asoman a estas carreras en busca de un manojo de técnicas, que se están adentrando en un terreno donde muchos de los retos que encontrarán, pertenecen al campo de la ética.