El número de pensionados del Régimen Obligatorio de Pensiones (ROP) crece aceleradamente en Costa Rica.
En el 2011 eran apenas 12 los jubilados que hacían retiros periódicos (retiro programado o renta permanente); en el 2016 el número llegó a 1.474.
Para los próximos siete años (cerca del 2024), la cifra superaría las 40.000 personas, si es que no se postergan las fechas de las pensiones, según estima la Superintendencia de Pensiones (Supén).
Para los futuros pensionados la Supén estima que la parte de la pensión que proviene del ROP llegará a representar un 15% del salario, para personas con 30 años de trabajo.
Prevé, además, que las prestaciones por retiros programados de los próximos años sean de ¢60.000 mensuales.
El ROP se creó con la Ley de Protección al Trabajador y complementa la pensión del régimen básico, de los cuales el que agrupa más trabajadores es el del Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).
Édgar Robles, exsuperintendente general de pensiones, estima que para las personas que hoy se jubilan el IVM les da un aproximado del 50% del salario y el ROP un 8%.
Para las personas que se pensionen a futuro, el IVM les estaría dando 40% y el ROP 18%, para quienes coticen 35 años. Esto bajo el supuesto de un aumento en cotizaciones.
Rodrigo Arias, uno de los autores del último estudio del Régimen de IVM que realizó la Universidad de Costa Rica, considera que quienes lleguen a cotizar 30 años obtendrían en el ROP entre un 13% a un 16% del salario como pensión.
Las personas que quieren obtener otro porcentaje más de salario como pensión tienen la opción de acogerse a un régimen voluntario.
El interesado puede pedirle a la operadora que le haga un estudio sobre cuánto tendría que aportar para alcanzar determinado porcentaje.