San José
Pocas personas se animan a utilizar el formulario que le permite a dos conductores acordar quién asumirá la reparación de los vehículos en choques menores, sin llamar al oficial de tránsito.
Desde hace un año, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) habilitó la posibilidad de optar por una conciliación rápida en choques menores, en lugar de llamar a la Policía de Tránsito.
Esto es posible al llenar la Declaración de Accidente Menor (DAM) , documento creado con el objetivo de agilizar la conciliación y evitar las presas, pues los automotores pueden ser movilizados rápidamente.
Sin embargo, los choferes prefieren utilizar la vía tradicional (llamar a la Policía de Tránsito) ante la desconfianza de que el otro conductor no asuma los daños luego de haber firmado el formulario y la existencia de una gran porción del parque automotor que no cuenta con seguro, según coincidieron las aseguradoras.
Al no tener la necesidad de llamar al Tránsito, los datos de las colisiones solucionadas mediante el DAM no están en el registro del MOPT.
Las cifras están en manos de cada una de las aseguradoras que ofrecen pólizas de vehículos: el Instituto Nacional de Seguros (INS), ASSA Compañía de Seguros, Mapfre, Lafise, Oceánica y Quálitas.
En conjunto, registran menos de 700 casos atendidos entre enero del 2016 y el mismo mes de este 2017. En contraste, al cierre de 2016, la Policía de Tránsito atendió 91.392 accidentes viales, más de 7.600, en promedio, cada mes.
En poco más de un año, el INS ha atendido un total de 658 casos. En los primeros meses de su vigencia, el DAM se utilizó en poco más de 100 casos por mes, sin embargo, la cifra mensual se fue reduciendo. La más baja fue en el mes de noviembre, cuando se registraron únicamente 18 casos.
En la acera de las instituciones privadas, la cifra es aún menor. ASSA registra 12 casos; Oceánica, cinco; Lafise Seguros, 11 y Quálitas, solo uno. Mapfre no envió la información al cierre de edición.
¿Cómo utilizarlo?
Los requisitos para utilizar la DAM son sencillos. En general, las colisiones deben cumplir con cuatro condiciones: primero, que en el choque estén solo dos carros implicados; segundo, que el accidente no provoque lesiones físicas a personas; tercero, que los automóviles estén en condiciones para movilizarlos y cuarto, que se disponga de dispositivos móviles para registrar el incidente con fotografías y videos.
Además de esto, los conductores deben portar la licencia y contar con el formulario del DAM impreso.
En ese documento se detalla información de cuáles partes del auto presentaron daños, cuál era la posición de los vehículos al momento del choque, si ambos cuentan con seguro voluntario, si existía señalización y cómo era el estado de la carretera, entre otros.
También, se debe indicar quién se hará responsable de las reparaciones de los vehículos, sea que uno de los conductores asuma todas las reparaciones o cada quien repare el auto que conducía.
¿Qué genera desconfianza?
A pesar de que el DAM cumplió un año de estar activo, hay características de esta vía rápida para solucionar choques que no terminan de convencer a los usuarios.
De entrada, una colisión menor no es sinónimo de reparación de baja cuantía, el formulario presenta un grado sofisticado de análisis y la distribución de la responsabilidad de los daños no es sencilla.
Luego de llenar el formulario, se deben asumir las responsabilidades adquiridas en el acuerdo, sea que los conductores dividirán a la mitad los gastos o alguno de ellos asumirá las reparaciones.
El DAM puede ser utilizado por personas que cuentan o no con un seguro voluntario de vehículos, pero esto genera desconfianza sobre si realmente el implicado asumirá sus responsabilidades.
Según Giancarlo Caamaño Lizano, gerente general de ASSA Compañía de Seguros, la mayoría no utilizan este mecanismo debido a que las negociaciones que efectúen requieren de la buena fe de los involucrados, y si alguna de las partes evade la responsabilidad sobre los daños causados, o bien no cuentan con una póliza de autos, la única forma de recuperación es mediante la vía civil.
Cifras del INS muestran que aproximadamente el 60% de los vehículos que circulan en el país no cuentan con seguro voluntario.
En la medida que una mayor porción del parque automotor cuente con una póliza, también se irá dinamizando el uso de la herramienta para conciliar más rápido en un choque, explicó Ronald Granados, subjefe de la Dirección Técnica de Indemnizaciones del INS.
¿Qué pasa si el responsable no asume los gastos?
Más allá de la buena fe, el responsable de los daños se compromete a reparar los vehículos; por medio del DAM, lo hace bajo fe de juramento.
"Si incumple, ya lleva las de perder en caso que el afectado quiera forzar el cumplimiento de la reparación a través de un proceso judicial", dijo Said Breedy, abogado especialista en seguros y socio de Finlex.
El desincentivo recae en el lento proceso para resolver un caso de esta índole.
Se trata de un proceso judicial civil ordinario que demora muchos años en resolver la existencia del derecho a cobrar los daños, mediante sentencia, comentó Breedy.